Un documental emitido por el canal 12 de la televisión israelí pone de relieve las conexiones de la Flotilla de Gaza con organizaciones palestinas. Una infiltrada en la flotilla denuncia lo que ocurría en esa expedición y su financiación por parte de Hamas y de los Hermanos Musulmanes.
Se presenta como una joven suiza voluntaria y la organización la envía a Hebrón, Cisjordania, para documentar y contar lo que ve a sus responsables.
Graba las charlas con los activistas que participarían en la flotilla. "El sueño sería que el sionismo nunca hubiera existido", dice una.
"Desearía que hubiera una bomba y los matara a todos", asegura otra.
Se reúne con Paul Larudee, organizador de la flotilla y simpatizante de los regímenes sirio e iraní.
Le pregunta quien financia la flotilla y presume de tener entre los donantes a Zaher Birawi, "muy cercano a Hamás".
Participa en la flotilla y muestra que apenas transportan nada de ayuda humanitaria. "Esto es una excusa para decir que llevamos suministros médicos o lo que sea, pero no vale nada".
Conoce a Amin Abu Rashid, responsable de las finanzas de Hamás en Holanda. "¿Cuál es tu trabajo?, le pregunta. "Mi trabajo es que Israel caiga", les responde.