La líder opositora venezolana y premio Nobel de la Paz María Corina Machado agradeció este jueves desde Oslo el apoyo de Estados Unidos tanto en su salida de Venezuela como contra el "régimen" de Nicolás Maduro y pidió ayuda a las "democracias del mundo" para bloquear los ingresos que permiten al mandatario mantener su estructura.
En una rueda de prensa un día después de que el Comité Noruego del Nobel celebrara la gala de entrega del galardón, a la que ella no pudo llegar a tiempo, la opositora se mostró tan combativa contra Maduro como convencida de que conseguirán "liberar" al país.
Venezuela, según subrayó, volverá a ser libre y "la envidia del mundo". En estos momentos, a su juicio, el país "afronta una crisis multidimensional": no solo una crisis humanitaria, sino también una financiera, de servicios públicos y de seguridad.
Mientras el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro no ha perdido la oportunidad de atacar de nuevo a su opositora a la que a vuelto a comparar con un fantasma.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, expresó este jueves su apoyo al Gobierno venezolano en una conversación telefónica con el líder del país latinoamericano, Nicolás Maduro, informó el Kremlin.
La BBC asegura que los detalles del viaje de Maria Corona Machado a Oslo se mantuvieron tan en secreto que ni siquiera el Instituto Nobel sabía dónde se encontraba ni si llegaría a tiempo para la ceremonia de entrega del premio, que finalmente fue recibido en su nombre por su hija, Ana Corina Sosa.
Según el 'Wall Street Journal', para escapar de Venezuela, Machado se disfrazó, logró pasar 10 controles militares sin ser descubierta y se escapó en una lancha de madera desde un pueblo pesquero costero. El plan se gestó durante dos meses, según el rotativo, que cita a una persona cercana a la operación.
El viaje comenzó el martes con la salida de su país por vía marítima hacia Curazao, según hipótesis de analistas, y se completó con un largo viaje en avión de casi 9.000 kilómetros a la capital noruega, con escala en Estados Unidos.