Las bandas latinas han dado un giro a su forma de actuar: de las pintadas en los parques a las publicaciones en Instagram, TikTok o Telegram, donde a menudo comienzan sus enfrentamientos.
Este fenómeno representa un nuevo reto para las fuerzas de seguridad, que ahora deben buscar pistas más allá de la calle, incluso en la letra de canciones.
Las redes sociales como escenario de conflictos
Lo que antes eran territorios físicos ahora tiene su reflejo en el mundo digital. Frases publicadas en redes sociales ayudaron, por ejemplo, a la Policía a esclarecer un apuñalamiento reciente.
Según los investigadores, en la huella digital de las bandas hay pistas clave para prevenir reyertas y resolver delitos.
Símbolos, canciones y drill
Los agentes deben conocer los símbolos que las bandas utilizan en sus publicaciones y entender cómo se expresan mediante el drill, un subgénero del rap que refleja rivalidades y mensajes ocultos. Esto se ha convertido en una herramienta fundamental para anticipar conflictos y garantizar la seguridad.
Formación especializada
La lucha contra la violencia en redes requiere preparación. Por ello, la Policía participa en congresos especializados, como el celebrado recientemente en Alcalá de Henares, donde se comparten estrategias y se aprende a interpretar códigos y señales para ir un paso por delante de las bandas.
El objetivo final de estos congresos y formaciones no es otro que el de evitar que las disputas digitales se traduzcan en violencia en la calle.