El centro de inmigrantes de Carabanchel podría seguir el mismo camino que el CREADE de Pozuelo de Alarcón

El Ayuntamiento de Madrid estudia emprender el mismo camino que Pozuelo de Alarcón en relación al Centro de Acogida y Derivación de inmigrantes de Carabanchel. La alcaldesa en funciones, Inmaculada Sanz, ha advertido que el Consistorio está revisando la situación legal de ese centro, y ha solicitado los informes pertinentes al gobierno de Sánchez.

La Comunidad de Madrid pidió ayer el cierre de los tres macrocentros de acogida de inmigrantes que hay en la región.

En este sentido, el Ayuntamiento de Madrid ha rechazado las políticas migratorias del Gobierno central, defendiendo que "no se puede tratar a las personas y a la migración como pura mercancía" y ha exigido una inmigración "legal, regular y ordenada".

Así lo ha sentenciado la actual alcaldesa en su visita al distrito de Carabanchel, donde ha manifestado que "no es una política de migración correcta la que permite que las fronteras estén como un coladero".

En este sentido, Sanz ha reclamado medidas que gestionen la llegada de menores no acompañados a España y ha solicitado al Gobierno central que "no se desentienda de todas esas personas que entran al país"."Que el Gobierno esté utilizando, por ejemplo, el tema de los menores extranjeros no acompañados para sus enjuagues políticos con los independentistas creo que desde luego no es correcto", ha añadido.

Además, ha reclamado que los centros de acogida de inmigrantes establecidos en la ciudad de Madrid "eran temporales y no pueden consolidarse como definitivos" y ha insistido que el Consistorio madrileño "está comprobando que todo esté funcionando con plena normalidad y legalidad" en la capital.