Al otro lado del mundo. Literalmente. Y es que Nueva Zelanda está en las antípodas de España. Paisajes de cuento, una calidad de vida envidiable y naturaleza exuberante. Son los atractivos de un pequeño país situado en el Pacífico, al este de Australia, y que se encuentra en pleno Cinturón de Fuego, de modo que también soporta una gran actividad sísmica.