La Guardia Civil practicó en presencia del principal sospechoso una nueva inspección ocular en la casa de Majadahonda donde vivió la mujer de nacionalidad argentina desaparecida a principios de mes, han informado fuentes de la investigación.
Se trata de la segunda inspección ocular a la vivienda alquilada al detenido por la desaparecida con el objetivo de intentar recabar pruebas que esclarezcan lo sucedido y el paradero de la mujer, que se busca desde hace dos semanas. Los investigadores trabajan con la principal hipótesis de que el casero, en prisión provisional, mató a la mujer, la descuartizó, la metió en bolsas y las tiró a la basura.
Por ello, se siguen analizando los restos encontrados en una trituradora de carne casera hallada en la vivienda para determinar si son humanos o no y, si lo son, si se corresponden con esta persona, así como algunas gotas de sangre. También se continúa buscando los restos de la mujer en el vertedero de Pinto.
El principal sospechoso, añaden las fuentes, ha estado en tratamiento por problemas psiquiátricos. La Guardia Civil también estudiará los contratos de arrendamiento de otros inquilinos, cuyo paradero se intenta averiguar.