En la oncología es clave buscar la excelencia y la calidad para obtener resultados en salud que hay que medir. Y una de las herramientas más útiles de los últimos años es el uso, cada vez más generalizado, de la biopsia líquida. Basta un análisis de sangre para buscar células cancerosas.
El doctor Rafael López López, jefe del servicio de Oncología Médica en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela y presidente de la Academia de ASOMEGA, es uno de los mayores especialistas en la investigación de esta técnica. “La biopsia líquida se puede utilizar para ayudar a encontrar un cáncer en un estadio temprano.
También puede ser útil para ayudar a planificar el tratamiento, determinar su eficacia. La posibilidad de tomar varias muestras de sangre a lo largo del tiempo también ayuda a entender la clase de cambios moleculares que están ocurriendo en un tumor, y actuar con el cambio de estrategias de tratamiento”. Podría servirnos, por lo tanto, para vencer al cáncer.