Un examen novedoso para detectar el cáncer, derivado también de la tecnología, son las pruebas Next-Generation Sequencing (NGS), que, como señala en Fórmula Salud Osvaldo Graña Castro, miembro de la Unidad de Bioinformática del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, “permiten analizar el genoma del tumor, es decir, establecer la identidad genética del tumor a partir de los cambios en la expresión de las proteínas que varían su función y hacen que el tumor adquiera características malignas”. También existe la posibilidad de hacer un análisis genético del cáncer a través de un análisis de sangre. “En la sangre –apunta el investigador Osvaldo Graña-- circulan fragmentos y restos de ADN de las células tumorales los cuales se pueden analizar, aislar y secuenciar”. De esta manera podemos alcanzar diagnósticos certeros sobre un tumor antes, incluso, de que se manifiesten los síntomas. Es decir, podríamos hacer diagnósticos de precisión personalizados muy tempranos y anticiparnos en el tratamiento con lo que se obtendrán mejores resultados de supervivencia.
