Tras la pandemia se ha observado un cierto “cansancio vacunal” entre la población que ha hecho bajar la guardia respecto a la vacunación no sólo de gripe y Covid-19, sino también de otras enfermedades.
Es por ello necesario, como afirma en Fórmula Salud Leonor García Rodríguez, profesora de Enfermería en la facultad de Medicina de la universidad CEU San Pablo, “ser activos en salud, es decir, explicar a nuestros pacientes por qué conviene la vacunación empleando la evidencia científica y teniendo como ejemplo lo ocurrido en la pandemia: gracias a las vacunas frente al Covid-19 se consiguió un control de la enfermedad y recuperar poco a poco la vida de todo el mundo”.
La elaboración de calendarios de vacunación para toda la vida contribuye también a señalar que las vacunas no sólo sirven en edad pediátrica, también en la adolescencia, en la edad adulta y con mayor motivo en la población más anciana. “El progresivo envejecimiento de la población justifica la apuesta por la vacunación de los adultos como parte del envejecimiento saludable. Por eso conviene recomendarlas desde el embarazo, ayudando a la mujer y en los primeros meses de vida al recién nacido, hasta la edad adulta”.