El piragüista español Sete Benavides recibió en un acto celebrado en el auditorio Goyeneche de la sede madrileña del Comité Olímpico Español (COE), la medalla de bronce que le corresponde de la prueba de C1 200 de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
El deportista balear finalizó la prueba en aquella cita olímpica en cuarta posición y recibe ahora el bronce por reasignación, tras la sanción impuesta en 2019 por dopaje al lituano Jevgenijus Shuklin, que finalizó segundo.
Durante la ceremonia, Alejandro Blanco, presidente del COE, entregó la medalla a Benavides y lamentó que no pudiese disfrutar de ese "momento de gloria" en los propios Juegos. Tras recordar anécdotas de aquella prueba que presenció en directo, Blanco deseó suerte a Benavides de cara a París 2024.
"Era la medalla que me faltaba, ya puedo estar tranquilo"
Benavides aseguró que "esta medalla hubiera llegado al principio de mi carrera, cuando solo tendría dos o tres medallas, y ahora ya tengo 25 internacionales entre mundiales, copas del mundo y europeos" destacó el deportista mallorquín, al repasar su trayectoria.
Benavides atendió a la prensa tras el acto, y reconoció en sus declaraciones que "se podía haber hecho más deprisa" en referencia a la entrega de la medalla, aunque reconoció la influencia de "muchos imprevistos", incluida la pandemia, que demoró la ceremonia.
"Aunque sea tarde, ya ha llegado y estoy feliz por ello, y todos estamos felices, mi familia y amigos y yo" aseguró el piragüista balear a continuación.
