Se acerca el verano y, un años más, las autoescuelas madrileñas se encuentran con el mismo problema, el colapso del centro de exámenes de la Dirección General de Tráfico (DGT) en Móstoles.
En este centro se realizan casi el 80% de los exámenes de carné de conducir de la Comunidad de Madrid y, según denuncia la Asociación de Empresarios de Autoescuelas, se encuentra totalmente desbordado.
Actualmente casi 60.000 alumnos se encuentran a la espera de una cita para poder examinarse y obtener el permiso de conducción.
El problema se verá agravado en apenas un mes, ya que el centro de Móstoles cerrará sus puertas durante todo el mes de agosto, con lo que la lista de espera se seguirá incrementando.
Las autoescuelas culpan a la DGT de no contratar suficientes examinadores para la alta demanda de alumnos que hay, algo que vienen solicitando desde años.
El problema afecta tanto a los alumnos, que se ven obligados a esperar entre dos y tres meses desde que aprueban su examen teórico hasta conseguir una plaza para examinarse del práctico, con el coste que eso supone ya que deben seguir tomando clases; como a las autoescuelas, que no pueden dar salida a sus alumnos para coger otros nuevos.
La situación se agrava para aquellas personas que, además, necesitan el carné para poder trabajar, como son los alumnos que quieren examinarse del carné que les habilita para conducir vehículos pesados.