Emilia Soria, la joven madre de Requena (Valencia) que utilizó una tarjeta de crédito que encontró en la calle para comprar comida y pañales a sus hijas, no irá a la cárcel al haber sido suspendida la ejecución de su condena, según ha informado el abogado de la mujer, Jorge Albertini.
Emilia Soria fue condenada a un año y diez meses de prisión por un delito de falsedad en documento mercantil, y a otros seis meses de prisión por estafa por unos hechos que ocurrieron hace cinco años y medio.
Albertini ha explicado que su defendida no ha sido indultada por el Gobierno sino que el Juzgado de Ejecución Penal número 13 es el órgano que ha "inhabilitado la ejecución de la pena".