Volvo y Microsoft se han aliado para desarrollar la nueva generación de tecnologías para la industria del automóvil, de la que destacan que permitirá transformar la relación entre el cliente y el fabricante.
Las áreas de esta colaboración a largo plazo incluyen tecnologías de conducción autónoma y la utilización de los datos que generen los vehículos conectados para poder crear nuevos servicios, según explica el fabricante sueco Volvo en una nota.
Uno de los objetivos que se han marcado es que Microsoft HoloLens, a la que la multinacional tecnológica define como el primer ordenador completamente holográfico, se empleé en el futuro para redefinir cómo el cliente puede explorar un coche y, al mismo tiempo, cómo serán comprados y vendidos.
HoloLens permite al comprador, mediante la realidad virtual, elegir el tipo de vehículo que quiere, tras explorar el color, el diseño o las opciones disponibles, explica Volvo.
A los vendedores les "libera" de la venta tradicional, ya que puede acceder a una configuración del automóvil en la carretera, en pequeñas tiendas, en centros comerciales o en la misma calle.
Esto les supone poder abrir nuevos canales de venta y conseguir una clientela mayor que la que acude a un concesionario a interesarse por un coche