Imaginen por un momento estar privados de cualquier estímulo sensorial. Flotar sobre el agua sin ver, escuchar, ni percibir nada del mundo exterior. Esa es la sensación que produce estar dentro de un tanque de flotación.
Una terapia de relajación profunda que se está poniendo de moda en muchos centros de estética y balnearios de España. Hemos ido a visitar uno de ellos para descubrir cómo funcionan.