Una pionera terapia ensayada en hospitales de Estados Unidos, Canadá, Francia y España ha puesto de manifiesto que la utilización de fármacos para la prevención del cáncer de mama reduce en un 65 por ciento la aparición de la enfermedad.
Se trata de un inhibidor de la aromatasa, que reduce el riesgo de sufrir este tumor. El exemestano, que así se llama el compuesto hormonal se ha mostrado eficaz en dos de cada tres mujeres que han participado en el estudio. Está destinado a mujeres sanas pero con riesgo elevado de desarrollar un tumor de pecho y en caso de aplicarse en España podrían evitarse 5.000 de los 20.000 casos de cáncer de mama que se diagnostican al año en nuestro pais según ha afirmado el doctor Jose Enrique Alés del Grupo de España de Investigación en Cáncer de Mama , GEICAM. Aunque el promotor de la investigación el doctor Paul Goss del Hospital General de Massachusetts eleva esa cifra a 10.000 o 12.000 casos evitables al año en nuestro pais.
Hasta ahora los fármacos preventivos frente al cáncer de mama eran muy poco utilizados. En Estados Unidos por ejemplo sólo los tomaban el 4% de las pacientes porque llevaban asociados efectos adversos graves como embolias pulmoneras o riesgo de desarrollar cáncer de endometrio. El exemestano sin embargo sólo ha registrado dolores musculares o dificultad para dormir.
Según los autores del estudio la eficacia es muy grande. Si para evitar un infarto es necesario que 250 pacientes tomen un fármaco contra la tensión, para evitar un cáncer de mama sólo hay que aplicar este tratamiento a 25 personas.
El cáncer de mama es el que más crece en el mundo desarrollado y las previsiones apuntan a que en una década el número de casos aumentarán un 50 %.