Cuando el otoño ya se ha acabado de adentrar en la capital, sus calles y parques se convierten en un precioso manto de hojas que caen de los árboles y lo tiñen de un precioso color pardo. Se trata de una imagen otoñal y bucólica para muchos, pero en Madrid Directo hemos comprobado que se puede converti en un auténtico peligro para otros. Valeria hoy ha ejercido de "ojeradora de las hojas" en este reportaje.