Las elecciones municipales del 28M en Barbadillo del Pez (Burgos) no se van a olvidar fácilmente. En esta localidad ha tenido que votar a un candidato muerto días antes de los comicios.
Claudio Gómez falleció cuando ya estaban confeccionadas las papeletas y no se permitió su sustitución. Así que el pueblo votó y el finado, candidato del PP, salió elegido. Consiguió el segundo mayor número de votos.
Pero ahora esos votos, por decisión del juzgado, se consideran votos en blanco. Esto crea una situación a resolver porque con esos votos en blanco el PP quedaría por detrás del PSOE que se haría con el concejo.
EN MANOS DEL TC
El Tribunal Constitucional deberá decidir si, finalmente, los votos que fueron a Claudio Gómez son blancos o se suman a los obtenidos por su compañero de formación. Esto daría el mando al PP. Caso contrario, el PSOE regiría Barbadillo del Pez.
A la espera de que se dilucide la cuestión, la página del Ministerio del Interior sigue sin ofrecer el resultado en esta pequeña localidad burgalesa.
CASOS SIMILARES
Este caso no es algo único. En Rumania en 2020, Ion Aliman Iba, el candidato más votado en una localidad había muerto diez días de las elecciones por la Covid.
Y en EEUU, el representante elegido por Pensilvania en 2022, Tony DeLuca, consechó el 86% de los votos de su distrito. A pesar de que llevaba muerto un mes.