Sánchez abrirá este miércoles una ronda de contactos con las fuerzas políticas

  • Calcula que necesitará tres semanas o un mes para negociar
  • Sánchez agradece al Rey la "confianza" para someterse al debate de investidura

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha anunciado que a partir de este mismo miércoles se pondrá en contacto con todas las fuerzas políticas para impulsar la formación de un Gobierno de cambio y progresista. "El cambio debe ser de la mayoría de los conciudadanos o no será", ha dicho Sánchez en rueda de prensa en el Congreso después de que el Rey le haya encargado que intente formar Gobierno.

El líder del PSOE ha asegurado que hablará con todas las fuerzas políticas de las medidas que son necesarias poner en marcha y que todos los ciudadanos tienen que tener cabida en ese proyecto de cambio, independientemente de su edad, su ideología o de lo que hayan votado.

Sánchez ha asegurado que la formación del Gobierno no es para él "un fin en sí mismo", sino que lo son "las políticas, y por eso ha insistido en no hablar de "sillones" sino de propuestas. "Antes de los nombres, programas y antes de con quién, viene el para qué".

ASEGURA QUE NO PROMOVERA UNA REFORMA CONSTITUCIONAL QUE NO CUENTE CON EL PP

El líder socialista ha asegurado que no va a impulsar una reforma constitucional "que no cuente con el PP", sino que buscará el "consenso de todos" en este punto. Sánchez ha prometido que el PSOE "defenderá siempre la integridad de España y el respeto a la Constitución" y al mismo tiempo buscará una solución basada "en el diálogo" para garantizar esa integridad.

Según ha subrayado, ante el debate soberanista en Cataluña "la ley no basta" y "hace falta política". Por eso, ha dicho, "hay que poner encima de la mesa soluciones basadas en el diálogo" y ha recordado que el Partido Socialista tiene una "propuesta clara", que es reformar la Constitución para "avanzar en un Estado federal que garantice la unidad de una España diversa".

El líder socialista ha insistido en que ahora que la convivencia está "puesta en cuestión por el secesionismo y el independentismo" el PSOE defenderá siempre la integridad de España y el respeto a la Carta Magna. Pero ha subrayado que hay que buscar una solución, ha apostado por la reforma que defiende el PSOE y ha señalado que dicha solución debe lograrse "con el mayor consenso posible de todos y sin exclusión".

Y en ese consenso ha asegurado que quiere que esté el PP, al que ha pedido "lealtad" en el caso de que pase a la oposición. Ante el debate catalán es necesario, ha insistido el líder socialista, un "nuevo entendimiento" que permita reforzar la convivencia como españoles y europeos.

"YO VOY EN SERIO"

Sánchez, asimismo, ha asegurado que él va "en serio" en su disposición a formar un Gobierno "de cambio" porque los españoles "se merecen y necesitan" un Ejecutivo y ha pedido "al menos un mes" para aglutinar los apoyos necesarios."Tenemos que pensar en el bien común", ha recalcado.

El secretario general del PSOE ha reconocido ser consciente de las dificultades que entraña haber aceptado el desafío de intentar formar Gobierno, pero al mismo tiempo ha recalcado que hoy "la esperanza de una España mejor está muy viva" y se ha comprometido a convertir que esa esperanza se convierta en realidad.

Sánchez ha insistido en que considera un "inmenso honor" afrontar ese desafío desde el diálogo y ha rechazado la política de "frentes" que sólo "dividen y separan". "Abro la mano y espero que también lo hagan el resto de fuerzas políticas. No hablemos de vetos y de tácticas partidistas porque haremos un flaco favor a la esperanza de cambio de millones de españoles", ha insistido.

Parafraseando a Cervantes y ante las dificultades que se presentan en el camino, ha concluido: "A cualquier mal, buen ánimo repara".

AGRADECIMIENTO AL REY

Asimismo, ha valorado la "exquisita" labor desempeñada por el Rey en sus consultas con los partidos y ha agradecido la "confianza" depositada en él y en su partido para intentar formar gobierno. "El grupo socialista y yo vamos a asumir esa responsabilidad de intentar formar gobierno", ha dicho Sánchez en una rueda de prensa en el Congreso tras recibir el encargo de Felipe VI.

El Rey ha propuesto este martes al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, someterse al debate de investidura para intentar ser presidente del Gobierno, según ha anunciado el presidente del Congreso, el socialista Patxi López.

Así se lo ha comunicado Felipe VI a López, al que ha convocado a las 19.30 horas en Zarzuela tras concluir la segunda ronda de consultas con los diferentes líderes políticos antes de designar un candidato a la Presidencia del Gobierno.

Pedro Sánchez ha anunciado esta mañana al monarca su disposición a intentar formar Gobierno en caso de que el presidente del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy, renunciara a hacerlo, como así se ha confirmado.

Rajoy ha asegurado que sigue sin tener los apoyos necesarios para someterse a una sesión de investidura, aunque no renuncia a hacerlo más adelante. De hecho, el Rey, diferencia de la primera ronda de consultas, no le ha hecho este ofrecimiento.

El líder socialista, Pedro Sánchez, calcula que necesitará entre tres semanas y un mes para negociar la formación de un Gobierno y así se lo ha comunicado al presidente del Congreso, Patxi López.

"Es razonable que tengamos ese tiempo prudencial para convocar ese pleno", ha dicho López en comparecencia de prensa tras anunciar que Sánchez ha sido el candidato a la investidura propuesto por el Rey

QUE SE SIENTEN A HABLAR "EN SERIO"

López ha mostrado su deseo de que los partidos se dejen "de comunicaciones a través de los medios" y se "sienten a la mesa" para "hablar en serio" para un posible pacto de Gobierno, de modo que "empiece a contar el tiempo" y el proceso pueda tener una conclusión. "O un Gobierno o unas eventuales elecciones, pero esperemos que sea un Gobierno, que para eso están estos trámites en marcha", ha manifestado.

Si finalmente se cumple las previsiones de tiempo de Sánchez, el Pleno de investidura podría tener lugar la primera semana de marzo, que es cuando empezaría a correr el plazo de dos meses que establece la Constitución para conseguir un Gobierno o, en su defecto, convocar elecciones, que, en ese caso, se celebrarían en mayo.