Rajoy confirma que no presentará una denuncia contra el joven que le agredió en Pontevedra

  • Difunde en Twitter un vídeo suyo caminando en la cinta: "Seguimos avanzando"
  • Asegura que no hubo "ningún fallo de seguridad" y que era "imposible evitarlo"

El presidente del Gobierno y candidato del PP a la reelección, Mariano Rajoy, ha confirmado este jueves que no presentará una denuncia contra el joven que le agredió en Pontevedra mientras estaba dando un paseo electoral. Además, ha señalado que seguirá dando esos paseos por la calle y haciéndose selfies con la gente.

Así se ha pronunciado Rajoy, en declaraciones a los periodistas durante su única visita en campaña a Cataluña, donde ha participado en un desayuno-coloquio de Barcelona Tribuna, organizado por La Vanguardia, AED y la Societat Econòmica Barcelonesa d'Amics del País, apenas 20 horas después del puñetazo.

Esta misma mañana, la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría había descartado que Rajoy curse denuncia contra el agresor, menor de edad y que fue detenido minutos después del puñetazo. "Esto no debería haber ocurrido pero es una cuestión que ya tiene que decidirse en otras instancias", ha dicho en declaraciones a los medios poco antes del inicio de un desayuno informativo del ministro de Justicia, Rafael Catalá.

"DARLE LA IMPORTANCIA QUE TIENE"

Ademas, Rajoy ha indicado que seguirá dando paseos por la calle y haciéndose selfies con la gente. A su entender, no hay que darle "más importancia de la que tiene" porque España es un pueblo "civilizado, tranquilo y moderado", aunque de vez en cuando haya una "excepción" a la regla.

El presidente ha asegurado a los periodistas que se encuentra "bien" y ha señalado que sigue con su agenda --este mediodía a Bruselas para participar en el Consejo Europeo y mañana cerrará campaña en Valencia y Madrid--. "No tenemos por qué cambiar en absoluto nuestra forma de hacer campaña", ha enfatizado, para añadir que ha recibido muchas llamadas, no ha tenido tiempo de contestarlas y procurará hacerlo en "las próximas fechas".

Al inicio del acto en Barcelona, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, --que ha presentado su conferencia-- ha dicho que los propios comentarios de Rajoy ayer en Twitter tras la agresión "demuestra lo que es". "Tiene altura de miras, tiene serenidad, tiene templanza. Es algo que en estos momentos es muy aconsejable para nuestra España", ha concluido.

"SEGUIMOS AVANZANDO"

El presidente del Gobierno y candidato del PP a la reelección, Mariano Rajoy, ha difundido en Twitter desde Barcelona un breve vídeo suyo caminando en la cinta de correr, con las palabras "seguimos avanzando" y sus iniciales, MR, lo que indica que es un mensaje personal suyo.

Un día después de la agresión que sufrió en Pontevedra, Rajoy ha deseado "buenos días y feliz jueves" desde la ciudad condal.

PIDE NO SACAR CONCLUSIONES POLÍTICAS

El presidente del Gobierno y candidato del PP a la reelección, Mariano Rajoy, ha pedido que no se saquen conclusiones políticas de la agresión que sufrió anoche en Pontevedra porque se trató de un "hecho aislado", la "excepción a la regla en un país civilizado".

"No saco conclusiones políticas de esto y pido que nadie lo haga", ha dicho en declaraciones. "Es la excepción a la regla general que es el civismo de los españoles", ha dicho también.

Rajoy ha asegurado que se encuentra bien y sólo tiene un pómulo "un poco hinchado". Según ha dicho, anoche le mandaron desde Madrid un nuevo par de gafas --ha relatado que tiene 5 dioptrías en un ojo y 3,75 en otro-- y hoy ha retomado su agenda en Barcelona, levantándose a las 7 de la mañana para ir al gimnasio.

El presidente ha hecho hincapié en que el miércoles no hubo "ningún fallo de seguridad" y que el puñetazo que le propinó el joven fue "imposible evitarlo", ya que él iba por la calle porque quería, le pedía fotos "muchísima gente y entre ellas puede aparecer una persona como la que apareció". Es más, ha agradecido al personal de seguridad que le "cuidó" ayer y todo el tiempo que lleva en Moncloa.

QUE NADIE CAMBIE SUS RUTINAS

También ha hecho ha hincapié en que no va a cambiar "absolutamente nada" sus rutinas, y ha pedido que ningún dirigente político lo haga. "Somos un país normal, donde puede haber algún incidente de cuando en cuando, pero nadie tiene por qué esconderse, este es un país libre y además con una gente estupenda", ha remarcado.

Así, ha dicho no estar "dolido" por lo que pueda significar el golpe y ha incidido en que todo el mundo fue "muy cariñoso" con él, también en el acto que celebró después en A Coruña. "Eso reconforta mucho, prefiero quedarme con la parte positiva de las cosas", ha dicho.

Rajoy ha asegurado que tras una primera parte de legislatura "durísima" ahora lleva "una temporada" más cercano a la calle y ha asegurado que se siente "muy cómodo", porque la gente es "normal, sensata equilibrada y razonable, y cada uno tiene su forma de pensar". "Que haya dos o tres que hagan cosas que no se deben hacer no nos debe llevar a sacar conclusiones que no son acertadas", ha insistido.

Según ha relatado, le han llamado todos los candidatos, aunque no ha podido responderles a todos, aunque procurará hacerlo. También habló anoche con su esposa y con sus hijos, y ha precisado que se quedaron tranquilos cuando les contó que no hubo mayores consecuencias.

Eso sí, ha apostado por "hacer pedagogía" de los valores de la tolerancia, el civismo y la moderación, y está convencido de que España "ha avanzado" en ese ámbito.

LA VICEPRESIDENTA ASEGURA QUE EL PRESIDENTE SE ENCUENTRA BIEN

La vicepresidenta primera del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado que el presidente Mariano Rajoy se encuentra bien tras ser golpeado ayer por un joven de 17 años en Pontevedra.

"Va a seguir su agenda con normalidad. Yo creo que se puso un poquito de hielo y ya está", ha indicado, en declaraciones a los medios poco antes del inicio de un desayuno informativo del ministro de Justicia, Rafael Catalá. "Repuestas las gafas, a seguir trabajando", ha agregado poco después.

Sáenz de Santamaría ha descartado, además, que Rajoy curse denuncia contra el agresor, menor de edad y que fue detenido minutos después del puñetazo. "Esto no debería haber ocurrido pero es una cuestión que ya tiene que decidirse en otras instancias", ha dicho.