Illa reivindica el derecho de los catalanes a tener unas instituciones respetadas
EUROPA PRES
El candidato del PSC a la Presidencia de la Generalitat, Salvador Illa, ha reclamado este sábado "salir del cul-de-sac (callejón sin salida) en que las fuerzas independentistas han situado" a Cataluña, y ha pedido empezar una nueva etapa política esta próxima legislatura.
En su intervención durante el Consell Nacional del PSC, ha dicho que cuánto antes haya un Govern capaz de desplegar las necesidades del territorio, "mejor para Cataluña, y mejor para los catalanes y catalanas".
"Un Govern que continúe trabajando por el reencuentro y un Govern que me comprometo a encabezar", y ha insistido en que este Ejecutivo sea progresista, de izquierdas y dialogante.
Ha planteado que el PSC sea "un proyecto abierto, no cerrado" que busque acercarse y dialogar con ciudadanos que aún no se consideran socialistas para incorporarlos al partido y que no se centre solo en las zonas metropolitanas.
Y que el partido "vuelva a ser aquel espacio creador de iniciativas, de ideas y de proyectos innovadores que hacen saltar a Cataluña hacia delante", así como a comprometerse con las nuevas generaciones y establecer alianzas con todos los sectores.
En cuanto a la acción política del próximo Govern, ha planteado que se centre en enfrentarse a la pandemia del coronavirus, en la reactivación económica y en que nadie quede atrás: "El falso camino hacia esta república imaginaria ha servido para esconder una nefasta gestión de los recursos públicos".
DOS DERECHOS
Ha reivindicado dos derechos de los catalanes: el derecho a unas instituciones respetadas "para dejar atrás estos diez años de degradación institucional", y el derecho a la estabilidad y a la tranquilidad.
"A un horizonte previsible, a unos años de previsibilidad de lo que harán las instituciones", y ha subrayado la importancia de que no se relacione el nombre de Cataluña con la inestabilidad y el desorden.
"Cuando hay violencia gratuita en las calles de Barcelona y otras ciudades y el Govern no responde con contundencia, lo que se perjudica es la imagen de Cataluña", y ha añadido que los conflictos se gestionan pero que la violencia se erradica, en sus palabras.
"DECADA PERDIDA"
Ha asegurado que los últimos diez años han sido una década perdida y en balde de la que el conjunto de la ciudadanía, en sus palabras, ha salido perdiendo: "Nadie puede sentirse orgulloso de lo que ha sucedido".
"Y, sin embargo, el Govern no ha aprendido nada. Ni a respetar a los Mossos d'Esquadra, ni a respetar a la Brigada Móvil (Brimo), ni a respetar a las empresas e inversiones, ni a respetar a los trabajadores, ni a respetar al Parlament y la Generalitat", ha añadido.
Ha opinado que el Govern no ha considerado ni el pasado, ni el presente ni el futuro de Cataluña: "Ustedes no solo no respetan a nadie, sino que ya ha llegado el punto en que ni siquiera parece que se respeten a sí mismos", ha dicho en alusión a los socios del anterior Govern, ERC y Junts.