La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, ha asegurado que el esquema de reforma de pensiones que plantea el Gobierno permitirá un "ahorro" de 3,5 puntos del PIB que reducirá a la mitad el incremento previsto del gasto en pensiones hasta 2050 y situará a España en la media de los grandes países europeos y reducirá la percepción de riesgo de la economía española.
Así, la reforma elevará la tasa de actividad dentro de 16 y 61 años entre un 1,5% y 2% a partir de 2030 y el PIB crecería entre 1,4 y 1,7 más en ese momento. El aumento de la base regulador supondrá tres décimas de PIB en 2040, y el aumento del periodo de cómputo implica a largo plazo un ahorro del 1% del PIB en 2050. Asimismo la aplicación del factor de sostenibilidad cada cinco años permitiría ahorrar otro 1%.
Por su parte, el ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez ha defendido que la reforma se trata de la "mejor de las posibles" porque cuenta con el aval de los agentes sociales y el pacto de Toledo, y garantizará "más y mejores pensiones" para el futuro.
Durante la comparecencia de ambos ante la Comisión del Pacto de Toledo para defender la reforma de las pensiones, han asegurado que la reforma permitirá pasar de un "riesgo alto" a un "riesgo medio" en el análisis de la sostenibilidad de las finanzas públicas, que llegará a "bajo" gracias al proceso de consolidación fiscal.
Gómez ha sido el encargado de detallar el articulado de la reforma y ha defendido, ante las críticas de la oposición, que el incremento del periodo de cálculo de 15 a 25 años será "compatible con subidas de pensiones a medio y largo plazo", y ha recalcado que la Seguridad Social parte de una situación de superavit, aunque sea del 0,2%. LO QUE PASARA EN 2050 IMPORTA HOY
Salgado ha justificado la necesidad de aprobar esta reforma "ahora que hay tiempo" porque la evolución demográfica de España a futuro repercute en la valoración de la economía española y la prima de riesgo hoy mismo, lo que ocasionaría más subidas de los tipos, con el consiguiente encarecimiento de la deuda pública y la financiación de los hogares.
"Si nos retrasamos, lo que es una ventaja hoy se convertirá en un inconveniente", ha asegurado, recalcando que sin reformas el aumento en pensiones a 2050 podría llegar a un 7% del PIB, un nivel que sólo comparte con Grecia, Luxemburgo, Rumanía, Eslovenia y Chipre, hasta el punto de que el gasto en pensiones superaría a toda la UE.
Pero gracias a esta reforma, la subida se recortará a la mitad y permitirá, como ejemplo, que el gasto en pensiones contributivas se sitúe en el 14,3% del PIB, un nivel medio similar al de países como Alemania, Francia, Dinamarca.
SALGADO RETRASA EL DEFICIT DE LA SEGURIDAD SOCIAL
"La reforma de las pensiones es necesaria y podremos beneficiarnos de los efectos de su implantación gradual a los largo de los próximos 16 años desde hoy mismo, a través de la mejora en la confianza y finanzas públicas en general", ha asegurado, afirmando que de no tomar medidas, el sistema de pensiones podría entrar en déficit "a principios de la próxima década, como muy tarde".
Las diferencias entre esta estimación y la fecha del 2014 que maneja la Fundación IDEAS, cuyo vicepresidente, Jesús Caldera, es el diputado socialistas al que se ha encomendado la negociación parlamentaria, han desatado las críticas de los representantes del PP en la Comisión.
EL PP NO SE FIA DE LAS PREVISIONES
Así el coordinador económico del PP, Cristóbal Montoro, ha reprochado a los dos ministros la poca fiabilidad" de sus previsiones, que no coinciden con las de sus compañeros de partido. "Cómo quieren que les creamos en lo que pasará en 2050 cuando ni siquiera pudieron anticipar lo que iba a pasar hace tres años", ha denunciado.
El portavoz 'popular' del Pacto de Toledo, Tomás Burgos, ha recordado que el Gobierno sostenía hacía unos meses que no proponía elevar el periodo de cálculo para ahora aprobar lo contrario y ha asegurado que "no respeta ni lo que firma", en alusión al pacto social.
