El Rey Felipe VI ha expresado este martes el "compromiso" de España con el "mantenimiento de la paz y la estabilidad en el sur de Líbano", en el marco de su participación en la Fuerza de Provisional de Naciones Unidas (FINUL), y ha aprovechado para recordar al cabo Francisco Javier Soria Toledo, fallecido el pasado 28 de enero por un ataque del Ejército israelí contra milicianos de Hezbolá.
"Todos nos sentimos profundamente orgullosos del trabajo que nuestros hombres y mujeres están realizando en su lucha por el mantenimiento de la paz y la estabilidad en el sur de Líbano. El compromiso de España con este objetivo es firme y decidido; y por ello continuaremos apoyando a las Fuerzas Armadas libanesas a través de nuestra participación en la FINUL", ha subrayado el monarca durante una recepción a la colectividad española en el país celebrada en la Embajada española en Beirut.
Al mismo tiempo, Don Felipe ha transmitido su "solidaridad a todos los compañeros" del cabo Soria y ha asegurado que "siempre" permanecerá en la "memoria" de los españoles. "El nos recuerda, una vez más, la abnegación, el sentido del deber y el compromiso de tantos miembros de las Fuerzas Armadas y de Seguridad españolas que han dado su vida en misiones de paz", ha apuntado.
Felipe VI ha pronunciado estas palabras en el marco de un viaje oficial de dos días a este país de Oriente Próximo en los que se reunirá con representantes del Gobierno y mañana, miércoles, visitará al contingente español desplegado en la misión de la ONU, compuesto actualmente por unos 580 efectivos. Es la primera visita del monarca, que ha viajado acompañado por el ministro de Defensa, Pedro Morenés,en una misión de las Fuerzas Armadas en el exterior desde su proclamación en junio del año pasado.
ESPIRITU DE CONCORDIA
Según ha remarcado el Rey, "Líbano es un país de gran diversidad y riqueza cultural del que podemos aprender muchos aspectos de la dinámica sociopolítica de Oriente Próximo", y ha deseado que "el espíritu de concordia de los libaneses dispuestos a gestionar el rico y, en ocasiones, mosaico de diferencias que conforma este país prevalezca siempre".
En su opinión, "españoles y libaneses son pueblos con energía y vitalidad que saben mirar hacia adelante, con los ojos puestos en un futuro de paz y bienestar". "Sé que en vosotros tenemos grandes aliados en esta tarea compartida", ha dicho Don Felipe a la comunidad española reunida en la Embajada.
El jefe del Estado ha elogiado la "entereza y valentía" con la que esta comunidad de españoles ha vivido "tensos momentos" durante su estancia en Líbano, como "guerras, evacuaciones y otras situaciones muy difíciles". Así, ha recordado al embajador Pedro de Arístegui y varios miembros de su familia, todos ellos fallecidos en un ataque sufrido por la legación diplomática en la guerra de principios de los ochenta.
Para el Rey, la sociedad libanesa tiene en la comunidad española en este país "a los mejores promotores de nuestros valores y de nuestra cultura". "Ese aprecio compartido, el que sentís por España y por este hermoso país, favorece la amistad entre nuestros dos pueblos basada en el entendimiento, la cooperación y el mutuo aprendizaje. Para ello se dan las condiciones propicias como es nuestra común identidad mediterránea y la percepción de cercanía que constituyen un excelente fundamento sobre el que seguir construyendo las relaciones entre Líbano y España", ha afirmado.
ADMIRACION POR LOS COOPERANTES
También ha hecho una especial mención a los españoles que han llegado más recientemente a Líbano y que en muchos casos trabajan en el ámbito de la cooperación, sobre todo a raíz del estallido de la guerra en Siria y la llegada de miles de refugiados.
"Os quiero expresar mi admiración y mi agradecimiento por vuestra tarea, que contribuye eficazmente a transmitir una de las mejores cualidades de la sociedad española: la solidaridad con los más vulnerables y con quienes se encuentran en circunstancias difíciles", ha remarcado.