La tormenta de este miércoles fue la más intensa de esta época en Madrid desde 1947 | Telemadrid
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El 1 de septiembre de 2021 dejó cerca de 41.000 rayos en la Península y récords de lluvia en Daroca (Zaragoza), Madrid o Navarra por el episodio de lluvias provocado por la llegada de una Dana a la Península, junto con la presencia de aire muy húmedo en capas bajas, según ha explicado el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Rubén del Campo.

Concretamente, la tormenta en la madrugada del martes al miércoles dejó 32,5 litros por metro cuadrado en el Observatorio del Retiro en Madrid, lo que la convirtió en "la tormenta más intensa para un mes de agosto desde 1947" en la capital.

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En este punto, el portavoz ha puntualizado que "aunque la tormenta se produjo en la madrugada del 1 de septiembre, se considera que tuvo lugar el 31 de agosto porque se habla de día pluviométrico y el día pluviométrico, en lugar de ir de cero a veinticuatro horas como el día civil, abarca desde las nueve de la mañana de un día a las nueve de la mañana del día siguiente".

Del Campo ha destacado también los 95 litros por metro cuadrado (l/m2) recogidos en el Observatorio de Daroca, en la cordillera Ibérica zaragozana. "43 de estos litros se recogieron en tan sólo una hora y convirtieron al 1 de septiembre de 2021 en la jornada más lluviosa en dicha localidad desde que hay registros y que tener en cuenta que Daroca tiene una serie de más de un siglo de historia", ha precisado.

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También el 1 de septiembre fue la jornada más lluviosa desde que hay registros en la localidad navarra de Tudela, a orillas del Ebro, y en el conjunto de la mitad sur de la Comunidad Foral de Navarra se trató del 1 de septiembre "con más precipitación en su conjunto de los últimos cincuenta años, teniendo en cuenta todos los meses del año", según Del Campo.

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Por otro lado, en las provincias de Cuenca, Guadalajara y Toledo, ha señalado que "se produjeron chubascos que no fueron demasiado duraderos, pero sí extremadamente intensos", como en el caso de la capital toledana. En este sentido, ha indicado que en el Observatorio Meteorológico de AEMET de Toledo "se recogieron cerca de 20 l/m2 en menos de veinte minutos y en la localidad también toledana de Ocaña se recogieron 10 l/m2 en sólo diez minutos".

"Estas precipitaciones tan intensas en poco tiempo provocar muchos problemas porque se forman grandes riadas y balsas de agua", ha alertado.

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En el área mediterránea también hubo precipitaciones intensas. Por ejemplo, en la localidad de Liria, en la provincia de Valencia, se superaron a lo largo de la jornada del miércoles los 90 l/m2 y en la madrugada del miércoles al jueves también hubo chubascos de intensidad muy fuerte en las provincias mediterráneas peninsulares e incluso en algunos puntos de Baleares han alcanzado estos chubascos intensidad torrencial.

Por otro lado, Del Campo ha explicado que todas estas lluvias y chubascos han estado acompañadas de una gran actividad eléctrica atmosférica. Así, la red de detección de rayos contabilizó en el conjunto de la Península y Baleares un total de 41.000 impactos de rayos aunque el portavoz ha señalado que esta cifra "queda lejos del récord total superior a 200.000".

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En cualquier caso, ha indicado que "es muy elevada para el mes de septiembre teniendo en cuenta que la mayor parte de los rayos provenían de tormentas formadas en el interior de la Península". "Normalmente, cuando tenemos estas jornadas con mayor número de rayos, suele ocurrir que tenemos un temporal mediterráneo y la mayor parte de estos rayos caen sobre aguas marítimas, pero en este caso se trató de tormenta formada sobre tierra y es una cifra bastante alta", ha explicado.

Por otro lado, también paralelamente y asociado a la inestabilidad atmosférica reinante, el 1 de septiembre dejó granizadas y rachas muy fuertes de viento. Del Campo ha destacado los 103 kilómetros por hora medidos en La Roda de Andalucía, en la provincia de Sevilla, o los 89 kilómetros por hora medidos en Villarrodrigo, provincia de Jaén, ambos en el transcurso de tormentas intensas registradas la tarde del miércoles.

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Fenómenos atmosféricos extremos cada vez más frecuentes

Sobre si estos episodios pueden ser más frecuentes como consecuencia del cambio climático, Del Campo ha explicado que, en la jornada del miércoles 1 de septiembre, la Organización Meteorológica Mundial, perteneciente a Naciones Unidas, "se hacía eco de un informe en el que relataba que los fenómenos meteorológicos extremos, las catástrofes meteorológicas, por decir alguna manera, se habían quintuplicado en los últimos cincuenta años".

"En el caso de esta dana, no podemos certificar que se deba al cambio climático hasta que no hagamos un estudio de atribución. Hay que destacar que, en el caso de las precipitaciones, los estudios de atribución son complicados porque las precipitaciones son muy irregulares: hay un periodos de sequía interrumpidos por por fuertes lluvias y esto dificulta la elaboración de estudios de atribución", ha enfatizado.

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En cualquier caso, ha precisado que "en este contexto de cambio climático, estos fenómenos atmosféricos extremos son ya más frecuentes y si las proyecciones se cumplen, lo van a seguir siendo en los próximos años".

"En ese sentido, en España ya se está observando que algunos puntos, sobre todo de la vertiente mediterránea, los días que hay lluvia torrencial son más intensas y que los periodos de sequía son más largos y se interrumpen por periodos de precipitaciones intensas. Y esto se está detectando, sobre todo esto último, en muchos puntos de la mitad sur", ha apostillado.

El fin de semana vuelve la estabilidad

Este viernes, continúa la inestabilidad en el cuadrante nordeste peninsular, con chubascos tormentosos de nuevo fuertes, localmente acompañados de granizo, sobre todo en Pirineos, nordeste de Cataluña e interior de Castellón.

Sin embargo, "la situación poco a poco tenderá a la normalidad con un fin de semana en el que el tiempo será más estable", ha avanzado Del Campo. Así, ha señalado que seguirán las tormentas en puntos del nordeste, pero serán más débiles y aisladas y en el resto del país "brillará el sol y volverá el calor, con un ambiente casi de pleno verano, que nada tendrá que ver con lo vivido en jornadas anteriores".

"Se superarán los 33 ó 34 grados en los valles de los grandes ríos de la vertiente Atlántica, Tajo, Guadiana, Guadalquivir e incluso se pueden rozar los 33 ó 34 grados a orillas del Cantábrico", ha concluido.