Una anciana ha muerto y otra ha resultado herida por la explosión que se ha registrado en la madrugada del lunes en una vivienda ubicada en el número 22 de la calle Torrelaguna, en el municipio de Alcalá de Henares, según ha informado Emergencias 112 de la Comunicad de Madrid.
El suceso ha tenido lugar alrededor de las 3.00 horas, cuando una explosión ha sacudido una vivienda de la primera planta de un edificio de cinco alturas. La primera hipótesis apunta como causa a una botella de gas propano que estaba en la cocina.
Como consecuencia de la explosión, las dos mujeres que se encontraban en el interior de la vivienda, de unos 90 y 80 años de edad, han sufrido un traumatismo abdominal y otro dorsal, respectivamente. El SUMMA las ha trasladado al Hospital Príncipe Felipe de Alcalá de Henares, donde la mayor ha muerto y la otra sigue ingresada con "pronóstico moderado".
Además, el SUMMA ha atendido a otros dos vecinos: un hombre cuya vivienda se encuentra también en la primera planta, por cortes en la cara, y una mujer del segundo piso, con heridas de carácter leve. Los dos han sido dados de alta en el lugar.
La explosión ha causado importantes daños materiales. Según Emergencias 112, las 13 viviendas del edificio "han quedado inhabitables", aunque no han sufrido daños estructurales que hagan temer el derrumbe del inmueble.
El bloque residencial que se encuentra en el número 24 de la calle Torrelaguna también ha sufrido las consecuencias de la explosión, ya que las seis viviendas que compartían pared con el número 22 han quedado inhabitables.
El Ayuntamiento de Alcalá de Henares se ocupará de realojar a los inquilinos que no tengan otra alternativa. Algunos ya han sido trasladados a hoteles. Se espera que en las próximas horas algunos puedan entrar en sus casas para recoger objetos personales.
UNA VEINTENA DE FAMILIAS DESALOJADAS
Una veintena de familias afectadas por la explosión han sido desalojadas de sus hogares y se encuentran recibiendo atención social y psicológica en una Oficina de Atención al Vecino, que ha creado el Consistorio de la localidad y que está situada a unos 100 metros del lugar de los hechos.
Así lo ha indicado el Ayuntamiento de la localidad que ha especificado que la mayoría de la veintena de las familias que han sido desalojadas se han hospedado en casas de familiares o amigos. Dos familias, que no contaban con esta facilidad, han utilizado el alojamiento facilitado por el Ayuntamiento.
Una portavoz ha explicado que el Consistorio ha creado una Oficina de Atención al Vecino, a 100 metros de las dos viviendas afectadas, que se ubican en los números 22 y 24 de la calle Torrelaguna. El objetivo de esta vivienda es prestar a los vecinos la asistencia social y psicosocial que necesiten.
Además, y según han indicado estas fuentes, los vecinos no podrán volver a sus viviendas durante "bastante tiempo" porque los suelos y techos de las viviendas se encuentran "muy afectados" por el incendio. Según el servicio de emergencias 112, las primeras hipótesis apuntan como causa a una botella de gas propano que estaba en la cocina.
De hecho, hasta que la policía científica y los técnicos del Consistorio no elaboren un informe sobre lo ocurrido los vecinos no podrán volver a sus hogares a recuperar "lo más urgente", que esta portavoz ha identificado con "medicinas" o "documentos oficiales".