Benedicto XVI ha asegurado que España es "una gran nación, que en una convivencia sanamenta abierta, plural y respetuosa, sabe y puede progresar sin renunciar a su alma profundamente religiosa y católica", en su último discurso en el aeropuerto de Barajas tras participar durante cuatro días en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Madrid.
"Lo ha manifestado una vez más en estos días, al desplegar su capacidad técnica y humana en una empresa de tanta trascendencia y de tanto futuro, como es el facilitar que la juventud hunda sus raíces en Jesuscrito, el Salvador", ha dicho ante los Reyes, el presidente del Congreso, José Bono, y el ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, entre otras autoridades congregadas para despedirle, a los que ha agradecido su "fina sensibilidad".
Además, antes de finalizar, ha asegurado a los españoles que reza especialmente por los matrimonios y las familias que afrontan diversas dificultades de diversa naturaleza, por los necesitados y enfermos, por los mayores y los niños y también "por los que no encuentran trabajo". "Rezo igualmente por los jóvenes de España. Estoy convencido de que, animados por la fe en Cristo, aportarán lo mejor de sí mismos, para que es país afronte los desafíos de la hora presente y continúe avanzando por los caminos de la concordia, la solidaridad, la justiticia y la libertad", ha añadido.
Gracias y enhorabuena a los jóvenes
También ha querido mostrar su agradecimiento a los organizadores de la jornada y a los obispos, sacerdotes, personas consagradas y laicos, por su "esmerada preparación" de la JMJ. Pero, especialmente, ha querido reiterar su agradecimiento "de todo corazón" a los jóvenes por haber venido. "Gracias y enhorabuena por el testimonio que habéis dado en Madrid y en el resto de ciudades españolas en las que habéis estado", ha subrayado. Y, de nuevo, les ha invitado a ha difundir su experiencia de fe vivida "en este noble País" por "todos los rincones del mundo", especialmente "a los que hubieran querido venir y no han podido hacerlo por las más diversas circunstancias".
"Dejo España contento y agradecido a todos", ha enfatizado, al tiempo que ha celebrado la "fiesta de la fe" que han compartido y que "permite mirar hacia adelante con mucha confianza en la providencia, que guía a la Iglesia por los mares de la hisotria". Esa es la razón de que permanezca, según ha dicho, joven y con vitalidad.
El Papa se ha sentido muy bien en Eapaña
El Papa se ha sentido "muy bien en España", según a dicho al Rey, al comienzo de sus palabras de despedida. "Estos días pasados en Madrid, con una representación tan numerosa de jóvenes de España y de todo el mundo, quedarán hondamente grabados en mi memoria y mi corazón", ha añadido. Por su parte, el Rey ha agradecido al Pontífice las palabras de "amor y esperanza" que ha dirigido a la juventud. También le ha asegurado que estos días han estado "llenos de alegrías y vivencias" para la multitud de jóvenes de España y del mundo entero, que "han seguido sus profundas palabras y reflexiones". "A partir de ahora, Madrid se recordará como uno de los más importantes y emotivos jalones de vuestros viajes a España", le ha asegurado.
Asimismo, le ha dicho que su visita anima a "contar con el compromiso generoso de la juventud para construir el mundo más justo, pacífico, solidario y sostenible". "Ese mundo mejor, desde el respeto a la libertad y la dignidad de la persona, requiere del esfuerzo, diálogo, entendimiento y de la cooperación de todos para asegurar la concordia y para superar crisis y desafíos", ha afirmado.
El Rey pide concentrarse en los jóvenes
Don Juan Carlos ha incidido también en que el presente demanda concentrar la atención en los jóvenes, "si se quiere ganar el futuro que ellos representan y se merecen". "El futuro solo será mejor si situamos los intereses generales por encima de las egoísmos particulares, si pensamos más en lo que debemos hacer por los demás, que en lo que podemos conseguir para nosotros", ha subrayado.
Un total de 2.000 invitados, junto a los Reyes don Juan Carlos y doña Sofía, han despedido esta tarde al Papa, que llegó el pasado jueves a España para asistir a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que ha congregado a un millón y medio de peregrinos en los actos centrales.
En la ceremonia de depedida han estado presentes también el jefe del Estado Mayor de la Defensa, José Julio Rodríguez; el presidente del Tribunal Constitucional, Pascual Sala; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón; la teniente-alcalde Ana Botella; Además, el secretario general del PSM de Madrid, Tomás Gómez; la embajadora de España ante el Vaticano, María Jesús Figa; la delegada del Gobierno en Madrid, María Dolores Carrión; la consejera de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Regina Plañol; y la portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáez de Santa María.