Agentes de la Policía Nacional han detenido a cinco individuos como presuntos autores de seis robos con violencia e intimidación que conformaban un grupo especializado en el asalto de viviendas en la Comunidad de Madrid, según ha informado la Jefatura Superior de Policía en un comunicado. A los detenidos también están acusados de detención ilegal, tenencia ilícita de armas y un delito contra la salud pública. En los asaltos que llevaban a cabo, una de las detenidas, disfrazada de cartera, simulaba entregar una carta certificada para conseguir que le abrieran la puerta del domicilio.
Tras ello, el resto del grupo accedía a la vivienda y, tras inmovilizar y amordazar a los moradores, cometían el robo. Los cinco individuos fueron detenidos 'in fraganti' tras asaltar una vivienda en el barrio de Villaverde. En el momento del arresto portaban cuarto armas de fuego municionadas y preparadas para abrir fuego.
La investigación de la Policía comenzó el pasado mes de septiembre del año 2010, cuando una víctima denunció el robo con violencia e intimidación cometido en su vivienda de Alcalá de Henares. En su declaración, la víctima manifestó a los agentes que una mujer, perfectamente caracterizada como cartera, llamó al timbre de su domicilio con la excusa de entregar una carta certificada.
MISMO 'MODUS OPERANDI'
En el momento que abrió la puerta, un grupo de individuos tapados con pasamontañas y portando varias armas de fuego, accedieron violentamente al interior. Le amordazaron y maniataron con cinta adhesiva y, pasados unos 45 minutos, huyeron del lugar tras apoderarse de dinero en efectivo, joyas de gran valor, relojes, teléfonos móviles y multitud de aparatos electrónicos. Los investigadores analizaron la denuncia y concluyeron que se encontraban ante un grupo "perfectamente estructurado", que había perpetrado otros robos en la Comunidad de Madrid, utilizando siempre un idéntico 'modus operandi'.
Los agentes consiguieron la identificación de la falsa cartera, Carolina V. P, de 29 años, que simulaba entregar correspondencia para que le franquearan la puerta. En todos los hechos esclarecidos vestía el uniforme y portaba el carrito habitual de los carteros. Tras su identificación, los agentes centraron la investigación en torno a su persona y pudieron comprobar que lideraba el grupo criminal junto a su hermano Alberto. Posteriormente, los policías averiguaron que el domicilio particular de los hermanos, cabecillas del grupo, era utilizado como centro de reuniones de la banda.
Se trataba de una vivienda situada en el distrito de Carabanchel, y en la que los presuntos delincuentes planificaban los hechos delictivos a realizar, almacenaban los efectos sustraídos provenientes de los robos, así como los instrumentos utilizados en los asaltos, armas de fuego y munición, bridas, pasamontañas, guantes, uniformes de empresas de servicios, entre otros efectos.
ARRESTADOS TRAS COMETER UN ROBO
En el transcurso de la investigación, el grupo, fue sorprendido uno de los días saliendo de un portal de una vivienda, al que habían accedido minutos antes, en el madrileño barrio de Villaverde. Portaban varias bolsas de plástico. Cuando se dirigían hacia los vehículos, la mujer se quitó el abrigo, mostrando un uniforme similar al de los carteros. Ante las evidentes sospechas de que hubieran cometido un nuevo robo, los agentes procedieron a su detención.
Los arrestados portaban cuatro pistolas perfectamente municionadas con cartucho en recámara y sin seguro, listas para hacer fuego real así como varios relojes, joyas y aparatos electrónicos provenientes del robo que acababan de cometer. En el registro realizado en la vivienda de los 'cabecillas' del grupo, los policías se incautaron de bridas, rollos de cinta adhesiva, guantes, pasamontañas y numerosas joyas y aparatos electrónicos procedentes, al parecer, de otros hechos delictivos. Igualmente se intervinieron 1.300 gramos de cocaína así como una prensa hidráulica utilizada para compactar la sustancia estupefaciente.
Hasta el momento se les imputan seis robos con violencia e intimidación en domicilios, si bien la Policía no descarta que estén implicados en hechos delictivos similares. Ya han sido puestos a disposición de la autoridad judicial. La intervención ha sido llevada a cabo por los Grupos I y II de UDYCO de la Brigada Provincial de Policía Judicial, pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Madrid.