La Policía Municipal de Madrid ha desalojado una discoteca en el distrito de Carabanchel en el interior del cual se escuchaba música a gran volumen y que tenía todas las puertas bloqueadas por la celebración de una fiesta privada que contó con 38 asistentes.
Los agentes recibieron llamadas de vecinos hacia las doce del mediodía del jueves alertando de que en el local de ocio Bubba había una fiesta con música a gran volumen, informa la Policía Municipal.
Entradas bloqueadas
Al comprobar que todas las entradas al local estaban bloqueadas, incluida la de servicio, los policías llamaron a la puerta en repetidas ocasiones, identificándose como agentes, pero tampoco así consiguieron que se les permitiese acceder al interior.
Entonces montaron una vigilancia discreta a la espera de la apertura de la puerta del establecimiento, que se produjo a las siete y media de la tarde.
Los agentes localizaron a la dueña del local, que les manifestó que las puertas de acceso estaban cerradas porque se trataba de una fiesta privada pero al acceder comprobaron que en el vestíbulo de entrada había cajas y enseres obstaculizando el paso.
Alcohol y drogas
Dentro del local, además de personas consumiendo alcohol, los agentes vieron a algunos asistentes esnifando una sustancia rosa y detectaron un fuerte olor a marihuana, por lo que confeccionaron diez actas por consumo de drogas.
La Policía Municipal, en el acta de inspección, hizo hincapié en que el bloqueo de las puertas del local anulaba por completo la capacidad de evacuación e impedía a los servicios de emergencia acceder al interior.