Cifuentes: "Madrid Puerta Norte es una carta a los Reyes Magos pagada con el dinero de otros"

  • La empresa promotora no se pronunciará hasta conocer el proyecto
  • Carmena propone un nuevo plan para Chamartín con 12.000 viviendas menos

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha considerado que el proyecto Madrid Puerta Norte presentado por el Ayuntamiento de Madrid es una "carta a los Reyes Magos pagada con el dinero de otros" .

"Es una carta a los Reyes Magos pagado con el dinero de otros. Veremos si los promotores están por la labor de sacar adelante el proyecto", ha afirmado Cifuentes preguntada por el proyecto que ayer presentó el Consistorio de la capital para los terrenos de la antigua 'Operación Chamartín'. "Esto parece una carta a los Reyes Magos.

Pretender que se construyan infraestructuras públicas para uso y disfrute de los madrileños sin poner un euro las administraciones", ha continuado Cifuentes, que se ha preguntado "quién paga esta carta a los Reyes Mago disminuyendo de manera tan radical la edificabilidad de la zona".

Según ha relatado, en el proyecto anterior esos aprovechamientos eran costeados por determinadas empresas, por lo que no iban a costar "nada" a los madrileños; pero se ha preguntado quien va a costearlos ahora si el Ayuntamiento decide "de manera unilateral rebajar esa edificabilidad" con la consecuente rebaja de ingresos.

La dirigente autonómica ha afirmado que aún no han hablado ni con los promotores ni con el Ministerio de Fomento, pero ha visto peor no haber "recibido ningún tipo de información, comunicación o petición de reunión por parte del Ayuntamiento de Madrid".

"Parece que no es lo más lógico que siendo la Comunidad de Madrid no solamente una de las administraciones interesadas por ser propietaria de una buena parte de terrenos, sino que cualquier modificación del Plan General de Madrid tiene que ser aprobado por el Gobierno de la Comunidad. No parece muy lógico que el Ayuntamiento haya sacado adelante un proyecto sin ni siquiera comunicarlo", ha destacado.

Cifuentes lo ha lamentado porque considera que desde la Comunidad han dado "buenas muestras" de querer ir de la mano en algunos asuntos y proyectos, pero en este caso, el "Ayuntamiento de Podemos ha preferido ir de la mano de su socios del PSOE y ha obviado no solamente a la administración central sino a la Comunidad".

"Espero y confío en que el Ayuntamiento se ponga en contacto con nosotros cuanto antes porque el miedo que tenemos es que todo esto suponga la escenificación de la paralización de uno de los proyectos más importantes para Madrid", ha indicado para añadir que el proyecto acordado entre todos suponía la creación de numerosos puestos de trabajo.

"Si el Ayuntamiento pone trabas a este proyecto estará cerrando la puerta e imposibilitando que muchos madrileños puedan tener un puesto de trabajo", ha concluido. Cifuentes, ha afirmado que sería "dramático" que la Operación Chamartín no se lleve a cabo, por lo que el Gobierno regional va a intentar que salga adelante y mantendrá una "posición de firmeza".

"En la Comunidad de Madrid, vamos a tener una posición de firmeza, pero necesitamos conocer el proyecto y saber si es suficientemente persuasivo para que los inversores abandonen Madrid, que, en muchas ocasiones, me temo que es lo que están buscando", ha apostillado.

LA PROPUESTA DE CARMENA: 12.000 VIVIENDAS MENOS

El Ayuntamiento de Madrid presentó ayer martes su propuesta Madrid Puerta Norte, que sustituye a la Operación Chamartín, y que pretende reducir a la mitad el área urbanizable (1,7 millones de metros cuadrados) y de 17.000 a 4.600 el número de viviendas construibles.

El Ayuntamiento propone convertir en edificables 1,7 millones de metros cuadrados al norte de Madrid con 4.600 viviendas (1.000 de ellas protegidas) y plantear dos intervenciones diferenciadas: una al sur de la M-30 con un carácter público y otra al norte de la M-30, eminentemente privada.

En el ámbito sur, junto a la estación de Chamartín, el equipo de Carmena pretende proyectar una gran área de Actividad y Negocios con 408.000 metros cuadrados de oficinas y cercana a las Cuatro Torres, aunque para ello necesita suscribir un consorcio urbanístico con el Gobierno central.

El Ayuntamiento quiere alzar allí dos edificios singulares de 40 plantas cada uno y dos conjuntos para oficinas que podrán contar con edificaciones de hasta 20 plantas. Para la zona al norte de la M-30 se planea una intervención fundamentalmente privada para el desarrollo de 3.600 viviendas (en edificios por lo general de 5 a 7 plantas) y 720.000 metros cuadrados para actividades terciarias.

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena (Ahora Madrid), dió ayer a conocer esta propuesta municipal, por el momento no consensuada con el Ministerio de Fomento y la Comunidad de Madrid, propietarios junto con el Ayuntamiento del 82% de los terrenos afectados, ni con BBVA y San José, promotores del plan y con derechos de gestión sobre los terrenos.

La versión de la operación anterior, denominada Distrito Castellana Norte y presentada en enero del pasado año, abarcaba más de tres millones de metros cuadrados, contemplaba construir 17.000 viviendas y prolongaba en 3,7 kilómetros el paseo de La Castellana.

A VUELTAS DESDE 1997

La necesaria remodelaión de la zona norte de Madrid se concibió hace 23 años como un proyecto para desarrollar el entorno de la Estación de Chamartín. En 1997, el Ayuntamiento, la Comunidad y el Gobierno Central acuerdan crear un Consoricio en el que tambien participan ADIF y DUCH, la empresa participada entonces por Argentaria, hoy BBVA, que desarrollaría el proyecto.

Se trataba de ampliar La Castellana en 4,5 kilómetros, soterrar las vías del tren y construir 10.000 viviendas, con una inversión de 233.000 millones de pesetas de las de entonces. Los sucesivos escollos administrativos y judiciales y la llegada de la crisis provocaron que las obras que iban a terminar en 2018 nunca llegaran a iniciarse.

En enero de 2015, cambio de nombre y acuerdo entre los promotores y las tres administraciones. Se llamaría Distrito Castellana Norte, a desarrollar en 20 años. Con 17.000 viviendas, rascacielos de oficinas y una inversión de 6.000 millones de euros. A punto de elecciones, el plan quedó listo para aprobar por el Gobierno entrante. Con la llegada de Ahora Madrid, se vuelve a paralizar

Ahora, el gobierno de Carmena, propone su propio plan. Se llama Madrid Puerta Norte y reduce a 4.600 el número de viviendas a construir en la zona. El Ayuntamiento pretende dar ahora prioridad a la mejora del nudo norte en 2017, reformar la estación de Chamartín en 2018 y construir una nueva estación de metro en el distrito de Fuencarral -entre las estaciones de Las Tablas y Montecarmelo- así como abrir nuevas líneas de la EMT para conectar los barrios del norte de la capital.

Carmena ha comentado que la reforma de Chamartín "se cubre sobradamente" con los "aprovechamientos" de la venta de los terrenos colindantes (de propiedad pública) con lo que "para los ciudadanos no tendría ningún tipo de coste". No obstante, se calcula una inversión inicial entre el conjunto de las administraciones de unos 560 millones de euros, que después se recuperarían con las plusvalías de la venta de suelo.

José Manuel Calvo se ha mostrado convencido de que habrá acuerdo con el Ministerio de Fomento para llevar adelante esta "reforma" necesaria del norte de Madrid "pendiente desde hace más de 20 años".

No obstante, el Ministerio de Fomento ha dicho que quiere saber cuál es el "compromiso de inversión" del Ayuntamiento para remodelar el norte de Madrid y ha reprochado que lo haya presentado "sin consensuarlo ni siquiera con los propietarios de la mayoría de los terrenos".

Distrito Castellana Norte (DCN), la empresa promotora de la reforma urbanística, no ha asistido al acto y no se pronunciará sobre el plan hasta conocer de primera mano el proyecto. El grupo municipal socialista ha felicitado al equipo de Gobierno por su plan.

Por su parte, el PP ha criticado al equipo de Gobierno municipal por dar por muerta "unilateralmente" la operación Chamartín, pues, según ha dicho el concejal José Luis Martínez Almeida, "no tiene sentido presentar el proyecto sin haber hablado en ningún momento con los propietarios minoritarios ni con los demás sectores afectados".

La portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, ha afirmado hoy que el proyecto no es viable en términos legales y ha augurado que un plan que debería aportar ingresos al Ayuntamiento "va a generar gastos".