Los vecinos de la calle Oña, en el barrio de Virgen del Cortijo, se han llevado un susto monumental esta noche por la caída de un árbol de importantes dimensiones que ha aplastado dos de los coches aparcados en la calle. Al parecer, según han comentado los vecinos, en uno de los coches estacionados se encontraba una persona que no ha sufrido daño alguno.
Los vecinos se quejan de que no es la primera vez que ocurre y que son varios los árboles caídos en la zona. Al parecer, los árboles los mantiene una empresa de jardinería contratada por la Mancomunidad.