La tranquilidad y la rutina reinan en Cuba tras la muerte de Fidel

  • El tráfico en las calles de La Habana era el habitual este fin de semana

La tranquilidad y la rutina de la vida cotidiana en Cuba apenas se alteró hoy tras conocerse la muerte de Fidel Castro, mientras que los ciudadanos de la isla expresan su pesar, admiración y orgullo por el líder de la Revolución, aunque también con expectativas de cambios para el futuro de la isla. El tráfico en las calles de la capital cubana era el habitual y el ir y venir de la gente transcurría con absoluta normalidad este sábado después de que el presidente cubano Raúl Castro anunciara, al filo de la media noche en una alocución televisiva, el fallecimiento de su hermano Fidel, a los 90 años.

Mientras, ceentenares de cubanos del exilio continúan concentrándose en la Pequeña Habana de Miami (EE.UU.) para festejar la muerte de Fidel Castro y expresar su confianza, entre gritos a favor de la libertad en Cuba, en que su deceso sea el principio del fin de la dictadura en la isla.

Establecimientos como el restaurante Versailles, centro neurálgico de los exiliados en Miami, y las aceras de las calles adyacentes se hallan copadas por una multitud que entre emociones desbordantes canta y celebra el fin de Castro.

Con una mezcla de júbilo por la muerte del "dictador" y de esperanza por un futuro en la isla libre del castrismo, muchos cubanos confiesan a los medios allí presentes que "esperaban celebrar desde hace años la muerte de Castro", mientras otros dicen que "más que celebrar la muerte de nadie, se celebra la esperanza" para la isla con la "desaparición del tirano".

NUEVE DIAS DE LUTO

Un luto de nueve días envolverá Cuba para despedir al líder de su Revolución, Fidel Castro, fallecido el viernes a los 90 años y a quien los cubanos rendirán tributo durante casi una semana con actos que se prevén multitudinarios en La Habana y también Santiago, donde será enterrado.

Los detalles de las exequias del barbado exmandatario se conocieron pocas horas después de que su hermano, el presidente Raúl Castro, con semblante desencajado y voz emocionada anunciara al pueblo el fallecimiento a través de la televisión estatal.

El duelo nacional fue decretado por el Consejo de Estado de la isla unas horas después del anuncio y establece que durante los nueve días en los que regirá "cesarán las actividades y espectáculos públicos" y la bandera nacional ondeará a media asta en los edificios públicos y establecimientos militares.

Además, la radio y la televisión cubanas "mantendrán una programación informativa, patriótica e histórica", según las instrucciones del principal órgano de Gobierno de Cuba.

EXEQUIAS

El comandante revolucionario había pedido ser incinerado, según detalló su hermano, el presidente cubano Raúl Castro, cuando la noche del viernes anunció el fallecimiento.

Tras la cremación, sobre la que no se ha concretado cuándo tendrá lugar, las cenizas de Fidel Castro iniciarán un periplo por toda Cuba, de occidente a oriente, un recorrido inverso que rememorará la "Caravana de la Libertad" que el líder encabezó en 1959 al comienzo de la Revolución.

Los restos mortales partirán el miércoles 30 de noviembre desde La Habana, donde residía, y recorrerán la isla durante cuatro días hasta llegar a Santiago de Cuba, una provincia en la que no nació pero que fue la cuna de la Revolución y a la que tanto él como su hermano Raúl estuvieron siempre muy vinculados.

Antes, los cubanos tendrán dos días para despedirse de Fidel en La Habana, en la emblemática Plaza de la Revolución donde pronunció largos discursos contra el enemigo estadounidense.

La población, según han informado las autoridades, podrá acudir a rendir homenaje al exgobernante en el Memorial José Martí de La Habana desde las 9 de la mañana hora local (14.00 GMT) del próximo lunes 28 y hasta el mediodía del martes 29.

Ese mismo día, a las 19.00 horas de Cuba (00.00 GMT), se celebrará "un acto de masas" en la Plaza de la Revolución de La Habana.

Asimismo, el lunes y el martes entre las nueve de la mañana y las diez de la noche, la población podrá "rendir homenaje y firmar el solemne juramento de cumplir el concepto de Revolución, expresado por nuestro líder histórico el primero de mayo de 2000, como expresión de la voluntad de dar continuidad a sus ideas y a nuestro socialismo", agrega el comunicado de la Comisión Organizadora.

Otro evento popular está programado para el 3 de diciembre en la Plaza Antonio Maceo de Santiago, una vez que las cenizas de Castro lleguen a esa ciudad.

El entierro está previsto para el 4 de diciembre, cuando se celebrará una ceremonia de inhumación en el cementerio de Santa Ifigenia.