Los sondeos publicados este viernes en Francia predicen la victoria del candidato socialista, François Hollande, en el último día permitido para hacerlo antes de la primera vuelta de los comicios presidenciales del próximo domingo. Tan sólo la encuesta del instituto Harris Interactive sitúa al presidente saliente, Nicolas Sarkozy, en cabeza en la primera vuelta con un punto porcentual de ventaja sobre Hollande, aunque también le da derrotado en la segunda, en la que el socialista obtendría el 53 % de los sufragios.
Es el sondeo más favorable al candidato conservador, que en la segunda vuelta no aparece por delante en ninguna de las encuestas que, en el peor de los escenarios, le otorgan una desventaja de 14 puntos y en el mejor de seis.
Según los últimos sondeos, el candidato socialista tendrá entre el 27 y el 30 % de los votos el domingo, mientras que la horquilla del conservador se mueve entre el 25 y el 28 %.
Harris sitúa a Sarkozy con el 28 % en la primera vuelta y a Hollande con el 27 %; Ifop les coloca a ambos empatados a 27 y LH2 con medio punto a favor del socialista (27 frente al 26,5%).
TNS Sofres da dos puntos más a Hollande (28 %), CSA tres puntos (28 %) e Ipsos (29 %) y BVA (30 %) 3,5 puntos.
Las encuestas fijan el nivel de abstención en torno al 25 % y señalan que todavía hay algo más del 10 % de indecisos, lo que puede modificar el resultado.
Las encuestas señalan a la ultraderechista Marine Le Pen como favorita a la tercera posición, una plaza que le disputa el izquierdista Jean-Luc Mélenchon que, según los sondeos, obtendrá el mejor resultado de una opción de izquierda radical desde 1981.
Le Pen se mueve entre el 14 % y el 17 % de los sufragios, aunque los expertos avisan del elevado voto oculto que sueñe acompañar al Frente Nacional, como se demostró en 2002, cuando sin que ningún instituto lo previera, Jean Marie Le Pen, el fundador del partido y padre de la actual candidata, se coló en la segunda vuelta por delante del socialista Lionel Jospin. Ningún sondeo predice esta situación el próximo domingo, aunque Marine puede mejorar el resultado que obtuvo Jean Marie en la primera vuelta de 2002, 16,86 %, el techo electoral de la extrema derecha francesa en unas elecciones con varios candidatos. Marine Le Pen se ha movido a lo largo de toda la campaña en torno al 15 % de los sufragios.
Mélenchon, por su parte, ha visto su cota de popularidad ascender durante la campaña y, gracias a sus multitudinarios mítines al aire libre, se ha convertido en la revelación de las elecciones.
Casi seguro de obtener un resultado muy superior al esperado por la coalición de extrema izquierda que engloba el Frente de Izquierdas, incluido el Partido Comunista de Francia (PCF), su reto pasa por superar a Le Pen, a quien dirige buena parte de sus críticas.
Los sondeos le otorgan entre el 12 y el 16 % de los votos, muy por encima del 7 % que le daban a principios de año. Una trayectoria contraria a la del centrista François Bayrou, que ha visto caer sus expectativas en los sondeos, que a tres días de la primera vuelta le sitúan entre el 9 y el 11 % de los votos.
Entre los otros candidatos -del total de diez que se presentan a los comicios- los sondeos colocan en cabeza a la ecologista Eva Joly (entre el 2 y el 3 %), por delante del soberanista Nicolas Dupont-Aignan (entre 1 y 2%), el trostkista Philippe Poutou (0,5 a 1,5 %), la marxista Nathalie Arthaud (0 a 1 %) y el gaullista de izquierdas Jacques Cheminade (0 a 0,5 %).
