La familia del religioso toledano Miguel Pajares, que está aislado en el hospital San José de Monrovia (Liberia) con motivo del ébola, intentará traerlo a España si el resultado del test de la enfermedad que se le ha hecho y es negativo.
Así lo ha indicado su sobrino Miguel Pajares, que reside en el pequeño municipio toledano de La Iglesuela (de medio millar de habitantes), del que es natural el religioso de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios.
Su sobrino ha dicho que si el resultado de la prueba es negativo "se intentará que vuelva a España", mientras que si es positivo "habrá que seguir las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud".
La familia está "muy afectada" y espera con incertidumbre el resultado de las pruebas, ha explicado.
El religioso natural de La Iglesuela, de 75 años de edad, está aislado en el hospital San José de Monrovia (Liberia), junto a otros trabajadores del centro, tras la muerte por ébola de su director, el hermano Patrick Nshamdze, según ha indicado Juan Ciudad ONGD, la organización de cooperación perteneciente a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios.
La ONG está a la espera de conocer el resultado del test del ébola que se está haciendo a las personas aisladas, a las que se ha extraído sangre hoy con este fin.
La prueba tarda un mínimo de seis horas en dar el resultado, por lo que "previsiblemente" se sabrán mañana por la mañana.
La familia del religioso está en contacto "casi continuo" con Juan Ciudad ONGD, ha apuntado el sobrino del sacerdote, quien ha comentado: "todo está en el aire, desconocemos cuánto tardarán en darnos el resultado porque depende de los medios de los que dispongan en dicho país".
En este sentido, ha añadido: "la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios lleva allí años, sabe cómo desenvolverse y está haciendo todo lo posible para saberlo cuanto antes y traerlo si es posible".
El sacerdote español tiene fiebre alta desde la semana pasada, y además de su elevada edad también padece problemas cardiacos, ha indicado a Efe la portavoz de Juan Ciudad ONGD.
Miguel Pajares lleva años trabajando en Liberia y es "un ejemplo para toda la familia, porque ha dedicado su vida a los demás", ha subrayado su sobrino, quien espera que el desenlace sea el mejor posible "para que pueda seguir haciéndolo".
"Es un riesgo que tiene ayudar al prójimo. Él ha querido dedicar su vida a ello con la mala suerte de que ha llegado una epidemia y le ha tocado", ha relatado su sobrino que, como el resto de la familia, espera que el resultado de las pruebas sea negativo.
EL VIRUS DEL EBOLA YA HA MATADO A 887 PERSONAS
El brote de ébola en África Occidental ha infectado ya a 1.603 personas, de las cuales 887 han muerto, según el último recuento de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Del 31 de julio al 1 de agosto, en los cuatro países afectados por la epidemia -Guinea Conakry, Liberia, Nigeria y Sierra Leona- hubo un total de 163 casos nuevos y 61 decesos.
Por países, los registros aportan los siguientes datos:
-Guinea Conakry contabilizó 13 nuevos casos y 12 muertos, lo que eleva el número de contagios a 485 y a 358 los fallecimientos.
-Liberia refirió 77 nuevos casos y 28 decesos, por lo que la cifra de contagios asciende a 468 y la de muertes a 255.
-Nigeria registró un segundo caso de contagio confirmado y se sospecha que hay otros tres infectados, aunque no se ha podido comprobar con certeza. En los últimos cuatro días no ha fallecido ningún enfermo en el país.
-Sierra Leona contabilizó 72 casos y 21 muertes, por lo que la cifra total de personas contaminadas asciende a 646 y 273 fallecidos.
Los portavoces de la OMS reiteran su preocupación ante las creencias erróneas sobre la enfermedad y el hecho de que la población no renuncia a costumbres ancestrales como lavar y abrazar los cadáveres antes de enterrarlos, lo que expone al contagio con el virus.
La enfermedad, que se transmite por contacto directo con la sangre y fluidos corporales de personas o animales infectados, causa hemorragias graves y puede tener una tasa de mortalidad del 90 %.
La OMS ha activado la Red Global de Alerta y Respuesta (GOARN, por sus siglas en inglés) -formada por agencias internacionales, gobiernos, universidades y otras entidades- y ha solicitado especialistas en diversas áreas que puedan viajar a los países implicados para intentar contener el brote.
La directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, y los presidentes de los países afectados por la epidemia de ébola en África Occidental presentaron la semana pasada un Plan de Respuesta dotado con 100 millones de dólares, con el que pretenden combatir la enfermedad.
El plan "identifica" la necesidad de activar a "cientos" de personas para ayudar en las labores de prevención y control, más allá de los cientos de trabajadores humanitarios y de los 120 empleados de la OMS que están actuando sobre el terreno.
Además, la iniciativa especifica que es necesario que los países vecinos estén listos para la eventualidad de un contagio. El objetivo final es parar el contagio y prevenir la transmisión en nuevos países.
La OMS señala que doblará sus esfuerzos en comunicación para asegurar que la población entiende cómo se contagia el virus y qué hacer para evitarlo. Asimismo, se quiere mejorar la detección y el registro de nuevos casos, especialmente en áreas fronterizas, y proteger al escaso personal sanitario.
Esta es la primera vez que se identifica y se confirma una epidemia de ébola en África Occidental, pues hasta ahora siempre se habían producido en África Central, y ya se ha convertido en el más letal de la historia de la enfermedad.