La oposición venezolana decidió sumarse a la medida de nulidad judicial interpuesta por la fiscal general, Luisa Ortega Díaz, ante el Tribunal Supremo de Justicia para bloquear la elección de una Asamblea Constituyente para redactar una eventual nueva constitución.
Aunque no ha habido un pronunciamiento formal por parte de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), a través de las redes sociales los dirigentes han pedido al ciudadano común que firme este recurso.
Para ello la oposición ha establecido un "operativo legal" para que todos los ciudadanos que quieran sumarse a este recurso puedan hacerlo con el apoyo de juristas voluntarios.
El parlamentario José Manuel Olivares señaló: "Le pedimos a todo venezolano de bien llegarse al TSJ y firmar el recurso de la fiscal en contra de la estafa Constituyente!".
Asimismo, el primer vicepresidente del Parlamento, Freddy Guevara, hizo un llamamiento a sumarse al recurso, y resaltó que "si cientos de miles de venezolanos se suman a la demanda de la fiscal, será una gran acción de presión y protesta".
La iniciativa de la fiscal, que ya ha venido marcando distancia con Gobierno desde hace unos meses, se presentó ayer ante el Supremo luego de que este negara una solicitud de aclaratoria hecha por Ortega sobre por qué se haría una Constituyente sin una consulta previa al pueblo.
La coalición opositora venezolana introdujo también hoy una "denuncia penal" en la Fiscalía contra el presidente Nicolás Maduro, los magistrados de la Sala Constitucional del Supremo y las rectoras del Poder Electoral por intentar cambiar "violentamente" la Constitución.
Desde la sede de la Fiscalía de Venezuela en Caracas, el diputado Tomás Guanipa, en nombre de la alianza, aseguró que estos funcionarios "han incurrido en un delito muy grave de violación de la Constitución" que, citando el Código Penal venezolano, señaló que deben ser castigados quienes "conspiren o se alcen para cambiar violentamente la Constitución".
En ese sentido, el portavoz opositor resaltó que el documento que entregaron en la Fiscalía pide que "se abra un proceso penal de investigación" contra estos funcionarios.
Un grupo de exfiscales, abogados y jueces que sirvieron durante el gobierno del fallecido presidente de Venezuela, Hugo Chávez, acudió también al Supremo para adherirse al recurso de nulidad interpuesto por la fiscal general.
El ex fiscal general venezolano José Benigno Rojas dijo a los medios que este grupo de juristas decidió aceptar el llamamiento de Ortega a sumarse al recurso legal que pide se anulen las decisiones del Poder Electoral de convocar a elecciones para llevar a cabo una Asamblea Nacional Constituyente.
"Quienes tuvimos durante muchos años la responsabilidad enorme e histórica de atender casos y de resolver muchas situaciones jurídicas, hemos decidido aceptar este llamado y nos hemos reunido en un conglomerado jurídico a nivel nacional", dijo Rojas, alegando la presencia de 43 fiscales que quieren "hacer parte como terceros interesados".
Los exfuncionarios sin embargo no pudieron consignar el documento porque el tribunal competente para recibir el documento amaneció hoy cerrado.
Los alrededores de la sede judicial estuvieron hoy bloqueados por equipos antidisturbios y efectivos de seguridad.
Esta situación fue advertida desde tempranas horas de la mañana por varios portavoces de la oposición, quienes a través de las redes sociales denunciaron que los accesos al TSJ estaban bloqueados por camiones de la Guardia Nacional (policía militarizada).
El vicepresidente ejecutivo venezolano, Tareck el Aissami, ha puesto fecha a la salida de la fiscal general del Ministerio Público, una vez que la Asamblea Constituyente sea electa y tenga la facultad de dictar decisiones por encima de cualquier otro poder del estado constituido.
"Dentro de 51 días esa Fiscalía estará en manos de un patriota o una patriota que haga justicia", dijo en un mitin gubernamental.
Este proceso ha subido la tensión del país, que desde el pasado 1 de abril experimenta una ola de manifestaciones a favor y en contra del Gobierno, algunas de las cuales han degenerado en hechos violentos que han dejado, según la Fiscalía, 65 muertos, más de mil heridos y al menos 422 detenidos.