El accidente de tren en el estado de Nueva Jersey, en EEUU, ha dejado un muerto y 75 heridos, de los cuales una decena se encuentran en estado muy grave, según el primer balance oficial ofrecido por las autoridades.
"Por ahora solo podemos confirmar que una persona ha muerto y que tenemos 75 heridos, de los cuales varios están en estado muy grave en el hospital", afirmó el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, de camino a la estación de Hoboken.
Según algunos medios locales, que citan fuentes de los servicios de urgencias, las víctimas mortales podrían ser tres y los heridos alcanzarían los 200, pero las autoridades de momento solo confirman un fallecido.
Decenas de los heridos fueron trasladados al hospital Jersey Medical Center, en la localidad vecina de Jersey City, donde entre nueve y once personas se encuentran en la sala de emergencias en estado grave o muy grave.
El director de ese centro médico, Joseph Scott, explicó en rueda de prensa que en sus instalaciones están siendo atendidas al menos 51 pacientes, pero aclaró que "no parece que corra peligro la vida de ninguno".
"Lo importante ahora es que todas las personas que iban en ese tren ya han sido rescatadas de los vagones", añadió el gobernador Christie en declaraciones a la cadena de televisión CNN mientras regresaba a Nueva Jersey para seguir de cerca lo ocurrido.
El accidente tuvo lugar hacia las 08:45 hora local (12:45 GMT), en un tren que no se detuvo a su llegada a la estación de Hoboken y se empotró contra la instalación, derribando al menos uno de los pilares que sujetaban el techo que cubría los andenes.
Christie explicó que se ha abierto una investigación en la que están trabajando autoridades locales, estatales y federales, para determinar las causas del accidente y aseguró que en este momento "nada hace pensar que haya sido un acto de terror".
Según la versión de las autoridades, corroborada por el relato de decenas de pasajeros y testigos, el tren iba a gran velocidad cuando entró en la estación, y los investigadores quieren averiguar por qué no pudo detenerse.
El aparatoso accidente, ocurrido en plena hora punta cuando miles de personas se trasladaban a trabajar a la ciudad de Nueva York, provocó un derrumbe parcial en la estación, y en estos momentos los ingenieros están evaluando los daños.
"La estación de Hoboken va a seguir cerrada para comprobar que no haya daños estructurales en el edificio y que podamos garantizar la seguridad de los pasajeros", añadió Christie, quien aseguró que está en contacto con el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo.
La Autoridad del Puerto de Nueva York y Nueva Jersey, la agencia que gestiona la red ferroviaria en la zona metropolitana, ha suspendido el servicio de trenes en Hoboken, al otro lado del río Hudson y por donde pasan a diario unas 50.000 personas.
Steve Mesiano, un pasajero del tren, dijo al canal MSNBC que en el momento del choque oyó un gran estruendo e inmediatamente las luces se apagaron, tras lo cual vio cómo el techo del primer vagón se desplomaba y al salir había muchas personas ensangrentadas.
En otro accidente separado, un hombre murió al ser arrollado por un tren del servicio regional Amtrak mientras cruzaba las vías en la estación Penn Station de Newark, según fuentes policiales citadas por el periódico local Star Ledger.