El Ministerio de Sanidad egipcio elevó esta noche a 72 muertos y 292 heridos el número de víctimas en los choques de la pasada madrugada entre partidarios del depuesto presidente Mohamed Mursi y la policía en El Cairo.
El portavoz de ese departamento, Jaled al Jatib, señaló que también ha habido ocho muertos y 500 heridos en otras provincias del país, entre el viernes y el sábado.
Esas ocho víctimas mortales se registraron en disturbios en Alejandría (norte), indicó Al Jatib, que corrigió la cifra de nueve muertos en esta ciudad que había anunciado previamente.
Los Hermanos Musulmanes, grupo al que perteneció Mursi hasta que accedió a la presidencia, rebajaron esta tarde a 66 el número de fallecidos en las inmediaciones de la plaza de Rabea al Adauiya, donde está acampados, aunque no descartaron que haya más muertos porque había 61 personas en estado de muerte clínica.
Esta mañana, la Hermandad llegó a hablar de hasta 200 muertos y 4.500 heridos en los disturbios.
Las versiones son contradictorias sobre lo ocurrido anoche en las proximidades de Rabea al Aduiya, situada en el distrito de Ciudad Naser.
El Ministerio del Interior ha acusado a la Hermandad de haber disparado perdigones y de intentar bloquear el puente 6 de octubre, uno de los principales de la ciudad.
Asimismo, el ministerio aseguró que la policía solo empleó gases lacrimógenos contra los manifestantes, que, subrayó, se enfrentaron a vecinos de Ciudad Naser a pedradas y con disparos de perdigones.
Según los islamistas, fueron los agentes policiales, apoyados por "baltaguiya" (matones), quienes atacaron a los manifestantes pro Mursi, contra quienes dispararon balas y perdigones a las cabezas y pechos.