Hasta 7.000 combatientes del Estado Islámico han muerto en los bombardeos de la coalición aliada de las cinco últimas semanas, según ha revelado el jefe del Estado Mayor del Fuerzas Aéreas jordanas, el teniente general Mansour al Jbour.
Al Jbour ha destacado que en los últimos tres días, tras conocerse la ejecución del piloto jordano Muaz al Kasaesbeh, la aviación jordana ha realizado 56 bombardeos sobre objetivos del grupo yihadista. Sumando estos ataques, los bombardeos jordanos suponen el 20 por ciento del total de los ataques de la coalición internacional contra el Estado Islámico.
Esta intensificación de los bombardeos jordanos habría conseguido acabar con el 20 por ciento de la capacidad del Estado Islámico, según ha explicado Al Jbour en rueda de prensa desde una base a las afueras de Amán, recogida por el diario 'Jordan Times'.
Al Jbour ha explicado que el miércoles, inmediatamente después de conocerse la ejecución de Al Kasaesbeh, los pilotos del grupo atacaron 19 objetivos, incluidos varios "centros de gravedad" del grupo: centros de dirección y entrenamiento y fuentes de financiación.
"El segundo día destruimos armamento, combustible y material", ha relatado Al Jbour. El tercero, "atacamos al personal del Estado Islámico, donde duermen y donde comen", ha añadido.
"Seguiremos con los ataques aéreos contra el Estado Islámico, pero no con la misma intensidad (...), de acuerdo con nuestro plan de operaciones", ha explicado. Estos ataques continuarán, ha advertido, hasta que el Estado Islámico "quede completamente abolido".