Irán abrió un nuevo y feliz capítulo en sus relaciones con el mundo con el fin de las sanciones por su programa nuclear, con su dignidad intacta y con el camino abierto para reintegrarse en la economía global, afirmó su presidente, Hasán Rohaní.
En una declaración difundida por la presidencia iraní, el mandatario reaccionó con alegría y satisfacción a la puesta en marcha anoche del denominado Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA) después de que la Unión Europea y los EE.UU. comenzaran a desmantelar las sanciones que pesaban sobre Irán en virtud de los pasos tomados por el país asiático para reducir su programa nuclear.
Rohaní felicitó además en su comunicado al pueblo iraní por la entrada en vigor del acuerdo con el que quedaron superadas las "crueles sanciones" que dañaron su economía habiendo mantenido toda su "dignidad y fortaleza" durante las "largas, profesionales y complicadas negociaciones" que llevaron al JCPOA.
"El JCPOA es el resultado de la resistencia, la determinación y la sabiduría de una nación que se opone a la guerra y la violencia y que ha elegido el camino de la lógica y la negociación", afirmó Rohaní.
El presidente subrayó que Irán superó ya "el periodo de dureza económica" y que a partir de ahora la "estrategia de la economía de la resistencia" desarrollada por el país podrá conectarse con los mercados globales. "Hoy se abre una era que pasa de las sanciones al desarrollo, que necesita iniciativa, innovación, inversión y el uso de las nuevas oportunidades por todos, particularmente los más jóvenes", afirmó.
Rohaní también envió un mensaje a los países rivales de Irán en la región y el mundo al afirmar que el JCPOA "no daña a nadie" y que "nadie debería preocuparse" por el éxito del mismo. "No somos una amenaza para naciones ni gobiernos. Estamos completamente preparados para proteger los intereses de Irán, pero también somos mensajeros de paz, estabilidad y seguridad en la región y el mundo", subrayó.
En ese sentido, resaltó que "todo el mundo está contento" con la aplicación del JCPOA "excepto los sionistas, los que buscan dividir al mundo islámico y un pequeño grupo de extremistas en los Estados Unidos".
Anoche entró en vigor el acuerdo anunciado el pasado mes de julio por Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., Francia, Rusia, Reino Unido, China y Alemania) diseñado para evitar que Irán pueda desarrollar armas atómicas al tiempo que le permite mantener un pequeño programa nuclear y se eliminan las sanciones contra su economía.
Entre otras medidas, el fin de las sanciones implica la liberación de miles de millones de dólares iraníes que estaban congelados en cuentas del exterior, la culminación del embargo al petróleo iraní y la eliminación de las restricción bancarias y de seguros que afectaban al país.
Desde que Rohaní asumió el poder en agosto de 2013, su administración hizo de la consecución del acuerdo nuclear una de sus prioridades, con la esperanza de que con el mismo mejore la situación económica del país.
El éxito en la consecución del acuerdo se espera que permita a Rohaní y sus aliados moderados obtener un buen resultado en las elecciones parlamentarias previstas para el mes de febrero, lo que facilitaría al mandatario avanzar en su agenda política y social, hasta el momento supeditada a la económica.