Familiares de las víctimas del atentado de Nueva Zelanda |
(Actualizado

Con motivo del ataque supremacista que causó 50 muertos en dos mezquitas el pasado viernes, Nueva Zelanda ha anunciado, por mediación de Jacinda Ardern, su primera ministra, que prohibirá las armas militares semiautomáticas y los rifles de asalto, salvo en algunos casos aislados.

Está previsto que la que la ley entre en vigor el próximo 11 de abril, e incluirá la prohibición de los cargadores de alta capacidad y las piezas que puedan convertir armas en rifles militares semiautomáticos.

El anuncio, que ha recibido un amplio apoyo de casi todos los sectores y la recolección de más de 40.000 firmas para pedir su prohibición, se da después de que el presunto atacante, el australiano Brenton Tarrant, utilizara dos armas semiautomáticas modificadas en los ataques a las mezquitas.

1,2 millones de armas por todo el país

En el país, un total de 250.000 personas poseen licencias para portar, a partir de los 16 años de edad, rifles y escopetas, una vez superadas una serie de pruebas policiales. En total, son 1,2 millones de armas de fuego legales e ilegales las que están distribuidas por todo el territorio.

Las excepciones que contempla el ejecutivo neozelandés responden a que, en ocasiones, las armas son necesarias en las zonas rurales para el control de plagas, y las competiciones internacionales de tiro de la Policía y las Fuerzas de Defensa.

Dentro de esta nueva normativa, también se excluirán de la prohibición los rifles y escopetas de calibre 0.22 que se usan comúnmente para la caza de patos, según un comunicado de la oficina de Ardern que da detalles de la medida propuesta.