El ex ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación Miguel Ángel Moratinos se ha entrevistado con el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Taib Fasi Fihri, en pleno conflicto por el Sáhara, según informaron fuentes diplomáticas.
El encuentro celebrado en la ciudad marroquí de Tánger ha tenido como tema principal de la agenda las perspectivas de la celebración de la cumbre de la Unión por el Mediterráneo (UpM) el próximo 21 de noviembre en Barcelona, así como abordar otros temas de actualidad de política bilateral.
La reunión entre Moratinos y el jefe de la diplomacia marroquí se produce en el contexto de una actualidad marcada por los graves enfrentamientos en El Aaiún entre saharauis y marroquíes y la decisión del Gobierno de Marruecos de impedir la entrada de periodistas españoles en El Aaiún.
Previamente a este encuentro, Moratinos ha mantenido contactos en París para abordar este tema con el jefe de la Diplomacia francesa, Nicolas Kouchner, y su homólogo egipcio, Ahmed Aboul Gheit, y previamente hizo lo propio en Argel con el primer ministro argelino, Ahmed Ouyahia.
Asimismo, Moratinos, que abandonó el cargo el pasado 21 de octubre, estuvo en Túnez, donde mantuvo igualmente contactos con las autoridades para preparar la cumbre y, según las fuentes consultadas por Europa Press, tiene previsto realizar en los próximos días un nuevo desplazamiento a Oriente Próximo para abordar esta misma cuestión.
La cita en Barcelona estaba prevista inicialmente para el pasado 7 de noviembre bajo presidencia española de la UE pero el Gobierno español, en acuerdo con Francia y Egipto que copresiden actualmente la UpM, optaron por aplazarla a una fecha posterior con el deseo de que la cumbre pudiera servir para dar un espaldarazo al proceso de paz en Oriente Próximo.
Desde entonces, palestinos e israelíes han retomado el diálogo, si bien éste se encuentra nuevamente paralizado después de que Israel haya suspendido su moratoria en la construcción de nuevas viviendas en los asentamientos. El anuncio esta misma semana de nuevas construcciones coincidiendo con la visita del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a Estados Unidos, no contribuye a mejorar el clima con vistas a la reanudación de los contactos.