Catrinas y catrines, esqueletos femeninos y masculinos, invaden el Paseo de la Reforma en Ciudad de Mexico, protagonistas del días de los muertos.
Pais que no adora la muerte, pero que sí la festeja llamando a disfrutarla en la calle, con disfraces que van de lo sencillo a lo muy sofisticado. Una fiesta que ha sido declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Como no podría ser menos, este año la fiesta ha realizado un homenaje especial a las víctimas del terremoto que devastó la ciudad el pasado 19 de septiembre, y a los voluntarios que colaboraron en las tareas de rescate.