La morosidad de los créditos concedidos por los bancos, cajas y cooperativas a particulares y empresas ha bajado por segundo mes consecutivo y se ha instalado en el 13,42%, incluyendo el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que han dejado de ser considerados dentro de la categoría de entidades de crédito.
Según los datos provisionales hechos públicos este lunes por el Banco de España, el máximo de la mora ha bajado ligeramente desde el 13,52% registrado en enero al 13,42% de febrero. La cifra total de créditos dudosos se ha situado en 195.093 millones de euros, manteniendo, no obstante, uno de los niveles más altos de la serie histórica.
Sin incluir los cambios metodológicos, la ratio de morosidad disminuiría levemente por primera vez desde febrero de 2013 hasta el 13,65% desde el 13,78% registrado en enero, puesto que el saldo de crédito se redujo desde los 1,431 billones de euros hasta los 1,428 billones.
La mora registró descensos en diciembre de 2012 y febrero de 2013 por los efectos contables del traspaso de activos a la Sociedad gestora de activos procedentes de la reestructuración bancaria (Sareb), primero por parte de la nacionalizadas (Bankia, NCG Banco y Catalunya Caixa) y después por las entidades del grupo 2 (Ceiss, BMN y Caja 3).
DOS MESES CONSECUTIVOS DE RECORTES
Una vez corregido este efecto, la mora continuó su senda alcista, que se rompió en enero al incluir el cambio metodológico de los EFC y que ahora continua en febrero. En los primeros meses de 2013, la mora se había ralentizado, pero en junio de ese ejercicio se disparó hasta el 11,6%, hasta llegar justo al 13% el pasado mes de octubre y sobrepasar este umbral en noviembre, donde a día de hoy se mantiene.
La morosidad de la banca ha marcado una brecha de 4,27 puntos porcentuales respecto al máximo de la crisis anterior, que data de 1994, cuando se estableció en el 9,15%.En el último mes, el crédito global del sector se ha reducido en 4.368 millones de euros, al pasar de 1,457 billones en el mes de enero a 1,453 billones en febrero. No obstante, al ampliar la base de cálculo del crédito por incluir los datos de los EFC, el resultado que deriva es un descenso de la morosidad.
Ante el deterioro de la cartera crediticia, las entidades financieras han reducido levemente sus provisiones bancarias a febrero, por las menores exigencias del Gobierno y tras la menor exposición inmobiliaria hasta los 113.294 millones de euros. En enero, el colchón ascendía a 114.389 millones.
UN LASTRE PARA LOS BANCOS
El analista de XTB Jorge López ha explicado que los datos de la morosidad están condicionando el rumbo del sector financiero y ha señalado que los resultados de la banca se van a ver durante un tiempo lastrados por esta tasa.
El analista ha insistido en que las provisiones de los bancos "son cada vez mayores", pero, sin embargo, "las cuentas aún no cuadran poniendo al otro lado de la balanza los posibles dudosos". "El riesgo en el que incurren es real y todavía peligroso", ha añadido. López advierte de que cuando bajen los niveles de desempleo y la economía crezca de manera continuada y sostenible, la morosidad mejorará.