La Bolsa española ha bajado hoy el 0,22 por ciento perjudicada por el retroceso de las plazas europeas, que ha malogrado una nueva subida del sector bancario mientras el barril de petróleo Brent subía a 53,5 dólares, según datos del mercado.
Con la prima de riesgo en 125 puntos básicos, el principal indicador del mercado nacional, el IBEX 35, cedió 19 puntos, el 0,22 por ciento, hasta 8.669,2 puntos. Las pérdidas anuales se elevan al 9,17 por ciento.
En Europa, con el euro a 1,063 dólares, solo subió Milán, el 0,99 por ciento, mientras que Fráncfort cedió el 1 por ciento; Londres el 0,45 por ciento y París el 0,39 por ciento.
La sesión comenzaba con pérdidas después de la caída de la víspera de Wall Street, afectada por el retroceso del sector tecnológico.
Aunque los grandes parqués asiáticos habían subido alrededor del 1 por ciento por buenos datos de actividad en China, el mercado nacional se acercaba a 8.600 puntos.
El resto de la sesión, mientras se publicaban estadísticas sobre la evolución del sector industrial en Europa -en la zona euro no hubo cambios en noviembre respecto al mes anterior- la bolsa estaría pendiente de las ventas en el mercado de deuda (el rendimiento de los bonos españoles subió al 1,61 %) y de la cotización creciente del petróleo.
Con bandazos moderados, pendiente también de la marcha de la banca italiana, el parqué español conseguía escapar de las pérdidas poco antes de la apertura de Wall Street, pero volvía a chocar con la cota de 8.700 puntos.
Uno de los índice relevantes del parqué neoyorquino abría con ganancias tras conocerse el crecimiento de las peticiones semanales de subsidios de desempleo hasta 268.000 (251.000 en el período anterior), y mientras el petróleo Brent se cambiaba a 54 dólares el barril, el 4,2 por ciento más que en la víspera.
El mercado neoyorquino seguía al alza a pesar de la mejoría de la actividad en el sector industrial estadounidense en noviembre.
Así, el índice Dow Jones ganaba el 0,4 por ciento, aunque había recogida de beneficios en el tecnológico Nasdaq tras los máximos recientes y las amenazas de los reguladores del mercado de vigilar con lupa las cuentas de sus compañías, y el S&P 500 apenas variaba respecto a la víspera.
Al final de la sesión volvieron las pérdidas, condicionadas por el efecto que el aumento de los tipos de interés tendrá sobre las eléctricas y el alza del petróleo sobre empresas turísticas y aerolíneas, que no pudieron compensar los bancos.
De los grandes valores subieron Repsol, el 2,34 por ciento, el tercer mayor avance del IBEX, en tanto que BBVA ganó el 0,76 por ciento y Banco Santander el 0,67 por ciento.
Bajaron Inditex, el 1,49 por ciento, tercera mayor caída del IBEX; Iberdrola el 1,41 por ciento y Telefónica el 0,82 por ciento.
La mayor caída del IBEX correspondió a Amadeus, el 2,95 por ciento, mientras que Grifols bajó el 2,16 por ciento, seguida por Inditex y por Red Eléctrica, que cayó el 1,46 por ciento.
Banco Popular, por rumores de fusión y de dimisión de su presidente, Ángel Ron, avanzó el 13,66 por ciento, en tanto que el Banco Sabadell se revalorizó el 4,08 por ciento, con Repsol a continuación y ArcerlorMittal en cuarto lugar con un alza del 1,95 por ciento.
En el mercado continuo se negociaron algo más de 1.900 millones de euros con Prisa a la cabeza de la lista de empresas con pérdidas del 3,94 por ciento, mientras Codere sube el 24 por ciento por el aumento de los ingresos del juego por internet y la compra del 50 por ciento una filial uruguaya que no controlaba.