El consejero ejecutivo del BBVA José Manuel González-Páramo ha afirmado que la incertidumbre política en España costará "el 0,2% de crecimiento en 2016 y el 0,3% en 2017, porcentajes que se elevarían al 0,5% y 1,3%, respectivamente, si esa situación se prolonga seis meses más". González-Páramo se ha referido en estos términos en el desayuno organizado por la sociedad de garantía recíproca Elkargi en Bilbao, ante más de 270 representantes del mundo empresarial, financiero e institucional vasco.
El consejero ejecutivo del BBVA ha ofrecido la ponencia 'Situación Económica Global y Española, Retos y Oportunidades' en una sesión en la que ha estado acompañado del presidente de Elkargi, Josu Sánchez. González-Páramo ha afirmado que "el mundo crecerá un 3,2%, por debajo de esas tasas superiores al 5% a las que estábamos acostumbrados en el periodo anterior a la crisis".
Además, ha señalado que las economías desarrolladas se verán "afectadas en su competitividad, en el terreno geopolítico, por las repercusiones de los conflictos generados en su entorno, en el social y también en el descenso de la confianza y el incremento del riesgo".
El experto se ha referido a los "problemas por los que ha atravesado el euro, derivados de un mal diseño" y ha opinado que "Europa tiene que hacer sus deberes, que pasan por la integración económica y fiscal de la eurozona". Respecto a la economía española, ha afirmado que "podría crecer el 2,7% en 2016 y un porcentaje similar en 2017, lo que repercutirá positivamente en la creación de empleo, con dos millones de puestos de trabajo en estos dos años".
Por otro lado, ha señalado que "la demanda interna se está incrementado, no así la inversión empresarial", algo en lo que ha opinado "han tenido influencia las reformas estructurales realizadas y los llamados vientos de cola, el precio petróleo, una política más expansiva y las exportaciones".
Asimismo, ha alertado sobre "el incremento de los índices de incertidumbre, generado sobre todo por la actual situación política en España, con el correspondiente coste que ello tiene en el PIB". Al respecto, ha destacado que, según el Servicio de Estudios del BBVA, esos factores "nos costarán el 0,2% de crecimiento en 2016 y el 0,3% en 2017, porcentajes que se elevarían al 0,5% y 1,3%, respectivamente, si esa situación se prolonga seis meses más".
Finalmente, se ha referido al acuerdo comercial entre Europa y Estados Unidos, que "está avanzando a nivel técnico de una manera muy satisfactoria" y cuyas repercusiones en Euskadi "van a ser enormes", ya que "afectará positivamente los sectores exportadores del País Vasco, sobre todo, los de bienes de equipo y manufacturas".
MEDIDAS DE CRECIMIENTO
Por su parte, Sánchez ha opinado que "no es entendible que, ante una demanda interna aún débil, y una demanda externa con problemas, con los niveles de paro existentes, y con su incidencia en el consumo y en la confianza de la ciudadanía", se sigan aplicando "procesos y políticas de ajuste que, aunque necesarios, deben ir acompañados de políticas de crecimiento que permitan a las empresas primero resistir, y después abordar el proceso de recuperación con garantías de éxito".
Por ello, ha considerado "absolutamente necesaria la adecuación y flexibilización de los objetivos temporales de los déficits, así como la articulación paralela de políticas y proyectos de estímulo económico y de inversión", como "los que acaba de hacer públicos el lehendakari, Iñigo Urkullu".