Los visitantes del Museo Lázaro Galdiano de Madrid podrán atar sus deseos hasta octubre en las ramas de los naranjos del jardín de Parque Florido gracias al proyecto inicial de Yoko Ono "Wish Tree", que celebra su veinticinco aniversario.
El árbol de los deseos
La misma Yoko Ono escribió a mano las instrucciones que se deben seguir: "Formula un deseo. Escríbelo en un trozo de papel. Dóblalo y cuélgalo en una rama del árbol de los deseos. Di a tus amigos que hagan lo mismo. Y continúa deseando hasta que las ramas estén llenas de deseos".
Una vez los naranjos florezcan, se recogerán los deseos agrupados de cien en cien y se enviarán a Yoko Ono. El destino final de ellos es la isla de Videy en Islandia, donde se enterrarán en la instalación lumínica concebida a modo de escultura e ideada por la artista para este fin y como un homenaje a John Lennon.
Aunque se trata de la primera vez que el proyecto se lleva a cabo en Madrid, se han recogido más de un millón de deseos en numerosos centros culturales de EE.UU, Asia y Europa, entre ellos la Fundación Yannick y Ben Jacober en Alcudia (Mallorca), el Museo Guggenheim en Bilbao y el Centro de Creación Contemporánea de Córdoba.
