Terry O’Neill. El rostro de las leyendas, es la muestra de 66 imágenes en blanco y negro y color que el gran fotógrafo británico de los mitos del cine, la música, la moda y la política de la segunda mitad del siglo XX que puede verse en Espacio Fundación Telefónica.
La selección, comisariada por Cristina Carrillo de Albornoz, contiene algunas de las fotografías más célebres de Terry O’Neill, quien ha centrado su carrera en el retrato, documentando así los momentos más intimistas y naturales de los grandes mitos del cine de los últimos 60 años, los grupos de pop y rock que marcaron tendencia musical en los 60 y 70, los rostros más celebres de la política del siglo XX y las figuras de la moda, sobre todo, de los 90.
La exposición, se puede ver desde el 11 de octubre, se divide en seis grupos temáticos: supermodelos; política, realeza y deporte; los años 60; los años 70; Hollywood y los años 80 y Estrellas del Pop y del Rock. La retrospectiva comienza con la última fotografía pública de Winston Churchill y acaba con los últimos trabajos realizados por el artista, como la fotografía del 90 cumpleaños del político surafricano Nelson Mandela o el retrato del futbolista Pelé, imagen oficial del Mundial de Fútbol que se celebrará en Brasil en 2014.
El estilo natural e inconfundible de O’Neill nace de la conjunción de dos factores: el uso de la cámara de 35 mm, mucho más ligera y cómoda de manejar que las habituales de la época, y el acceso excepcional a los fotografiados, con los que pasaba días enteros como si fuera uno de ellos: “todos los fotógrafos utilizaban aún las aparatosas cámaras con grandes planchas. “Yo iba con mi pequeña cámara de 35 mm que muy pocos conocían y que había comprado en Fleet Street. Esa cámara, que me permitía tomar las fotos de manera más espontánea, discreta y directa, fue como una puerta de bienvenida a la fama”.
Según O’Neill, hay tres reglas imprescindibles para ser un gran fotógrafo: ser lo más invisible posible, tener una gran paciencia y saber combinar una gran discreción con unas grandes dotes de relaciones públicas.
DEL LONDRES DEL SWINGING A LOS ASTROS DE HOLLYWOOD
El Londres del swinging de la década de los años 60, en plena efervescencia cultural y social, fue documentado y vivido por varios fotógrafos de la época, entre los que se encontraba Terry O’Neill junto a Terence Donovan o David Bailey. En 1963, realizó la primera fotografía de los Beatles para el periódico Daily Sketch en el patio trasero de los estudios de Abbey Road, donde el grupo grababa su primer disco, Please, please. Además de ser la primera fotografía de los Beatles que se publicaba en prensa, también fue la primera vez que un grupo aparecía en la portada de un periódico británico. La tirada se agotó. A esta fotografía, le sucedieron muchas otras de grupos musicales de la época que empezaban a despegar como los Rolling Stones, David Bowie o Elton John o supermodelos como Jean Shrimpton o Twiggy, estrellas femeninas que poseían “una personalidad y carisma excepcionales”, según O’Neill.
Cuando O’Neill tenía veintiséis años, decidió ir a Hollywood a retratar a las grandes estrellas. Con la ayuda de sus amigos Michael Caine y Richard Burton, O’Neill se introdujo en el mundo del cine y retrató a Clint Eastwood, Paul Newman, Groucho Marx, Ava Gardner, Steve McQueen y a la que fue su mujer, la actriz Faye Dunaway. Los astros de la gran pantalla fueron recogidos por la mirada de O’Neill y formaron parte incluso de su círculo personal. Pero el más retratado a lo largo de su trayectoria artística fue el cantante Frank Sinatra, a quien fotografió durante 30 años, desde su primer encuentro en Miami, durante el rodaje de La mujer de cemento (Lady in Cement, 1968).
Por su objetivo han desfilado también políticos de la talla de Winston Churchill, el primer presidente de Sudáfrica elegido democráticamente y líder del antiapartheid, Nelson Mandela o la primera ministra británica, Margaret Thatcher. Desde los 90 sólo acepta encargos especiales como el retrato de la Reina Isabell II de Inglaterra o el 90 cumpleaños de Nelson Mandela.
Terry O’NEILL
Terry O’Neill (Londres, 1938) comenzó su carrera en el departamento de fotografía de British Airways en el aeropuerto de Heathrow en Londres, donde retrataba a a los viajeros que llegaban al país. En 1959 empezó a trabajar para el periódico Daily Sketch en Fleet Street y su primer encargo fotográfico fue Lawrence Olivier.
A partir de ahí, retrató los inicios de las grandes bandas de pop y rock de los 60 en Inglaterra. Después inició en Hollywood una carrera como fotógrafo profesional que le permitió acercarse a los grandes del cine y retratarles con un estilo que le ha caracterizado a lo largo de su trayectoria.
Terry ha sido galardonado con la medalla de la Real Sociedad Fotográfica Centenario en 2011 "en reconocimiento a su importante contribución al arte de la fotografía". El fotógrafo ha producido portadas para medios como Time, Stern, Paris Match, The Sunday Times Magazine, Vanity Fair y muchas otras publicaciones a lo largo de las seis décadas de trayectoria profesional, además de haber creado pósters para el cine y portadas de álbumes que se han convertido en iconos.
En la actualidad, su trabajo se exhibe en galerías nacionales y colecciones privadas de todo el mundo y promueve los premios internacionales de fotoperiodismo que llevan su nombre. Los fotógrafos Alessandro Penso, Wendy Sacks y Marc Wilson han sido reconocidos con el Terry O’Neill Photography Awards 2012, instituido desde hace ocho ediciones con el apoyo de The Royal Photographic Society para apoyar la trayectoria de los profesionales del fotoperiodismo.