Siempre fui Alex, es el título de un cortodocumental que narra la historia de un niño de 12 años: un niño transexual que nació en Villaverde bajo y que gracias a sus padres y a su propia fortaleza ha podido vivir, como cualquier adolescente de su edad, aceptándose tal y como se siente. Los directores y guionistas buscan financiación para hacer visible la cinta en todos los festivales del mundo.
El cortometraje tiene como fin sensibilizar a la sociedad sobre la existencia de identidades trans en la infancia y la adolescencia. Sus directores, Sancho Ortiz de Lejarazu y Roberto Ruiz Céspedes, en colaboración con la Fundación Daniela, dar visibilildad al colectivo de niños y adolescentes transexuales.
En el documental él dice que siempre ha sido como es. Alex: un niño transexual. "Alexandra, Alejandro, Alex, es simplemente un nombre. Es la persona como se identifica. Así que siempre he sido como soy", dice con naturalidad y madurez.
Y él es un niño como los demás, del Real Madrid, que puede pasar horas jugando a la play y que sueña con ser ingeniero de Fórmula 1. No solo él, también sus padres, quienes siempre le dieron su apoyo a pesar de las dudas y la incertidumbre a la que tuvieron que hacer frente, al no saber que le pasaba. Alex hace dos años dijo adios a Alexandra con el apoyo de sus padres y de todos sus compañeros.
Ahora, a través de un documental, sus directores quieren clarificar y no dramatizar este tipo de situaciones. Al respecto, Alex dice con naturalidad: "Si hay aguien fuera de la pantalla que se sienta identificado, que sepa que no pasa nada, es una cosa normal". El cortometraje ya ha sido presentado en varios festivales pero han iniciado una campaña de crowdfunding para poder aumentar su disribución en otros espacios nacionales e internacionales.