En el teatro real La Reina Doña Sofía presidió anoche la inauguración de la temporada de ópera que se abre con "Elektra" del compositor Richard Strauss. Después de diez minutos de aplausos finales, la Reina saludó a los intérpretes, especialmente a la soprano Christine Goerke, que se alternará con Deborah Polaski en el papel de Elektra. Un drama familiar con la venganza como motor y una partitura difícil para músicos y cantantes. Cultura griega y psicoanálisis se dan de la mano en esta ópera.
Un reto, esta "Elektra" de Strauss a la que arropa una orquesta tan nutrida que el Real ha tenido que retirar dos filas de butacas para aumentar el tamaño del foso. Entre este viernes y el 15 de octubre se ofrecerán 10 representaciones. Dos repartos y 110 músicos bajo la dirección de Semyon Bychkov.
Dirigida por el prestigioso Semyon Bichkov, el montaje cuenta con una espectacular escenografía de Anselm Kiefer y dirección escénica del fallecido Klaus Michael Grüber.
El subdirector técnico del coliseo madrileño, Carlos Abolafia ha explicado este martes el "reto" que ha supuesto poner en pie esta escenografía "de gran volumen" que ha requerido utilizar una rampa que incline un 5% el escenario para que pueda verse desde el patio de butacas en todo su esplendor. Hasta 10 camiones han sido necesarios para trasladar este derorado