El sonido monocorde de las 'vuvuzelas' no se oirá en los estadios donde se disputen partidos de competiciones de la UEFA, ante la prohibición dictada por este organismo y que es de inmediata aplicación.
La UEFA ha decidido que estas trompetas, de gran notoriedad en la pasada Copa Mundial de Sudáfrica, no podrán ser introducidas en los estadios "por razones relacionadas con la cultura y tradición del fútbol europeo", y añade que "la atmósfera de los partidos podría cambiar con el sonido de la vuvuzela".
La UEFA cree que el uso de este instrumento "no sería apropiado en Europa, donde lo más característico es el continuo ruido de fondo de murmullo".
Para el contexto más preciso de Suráfrica, la UEFA explica que la 'vuvuzela' "aportaba un toque de folclore y cultura local".
"La magia del fútbol consiste en el intercambio bidireccional de emociones en el campo y en las gradas, donde el público puede transmitir una amplia gama de sentimientos hacia los jugadores. Las 'vuvuzelas' cambiarían por completo la atmósfera, ahogando las emociones de los aficionados y alejándoles de la propia experiencia del deporte", opina la UEFA.