Cinco años han pasado desde que Rossy de Palma se subió al escenario para interpretar el monólogo "Resilienza d'amore", un conjunto de piezas basadas en la poesía visual que le encargó el Teatro Piccolo de Milán, que ahora revisita con "Resilienza D'Amore" (#mipiaccenonmipiacce).
Un nuevo proyecto que pone en marcha en los Teatros del Canal de Madrid hasta el 6 de diciembre, en el que la actriz reivindica el arte como resiliencia para superar las circunstancias traumáticas de la vida, una palabra que descubrió hace veinte años leyendo a Boris Cyrulnik, un neurólogo que había tratado a personas que vivieron la experiencia de un campo de concentración.
Un concepto con el que se identifica y con el que realiza un homenaje a la música, la pintura, la fotografía, la moda y, en general, al "arte como bálsamo que embellece la vida", ha explicado en una nota la actriz, sobre este monólogo surrealista.
Un encuentro "íntimo" en el que evoca a Dalí, Picasso o Lorca, en el que repasa algunas de las experiencias de su vida, que define como "un acto de rebeldía" animado por la voluntad de "saber lo qué se esconde detrás de la apariencia de las cosas”, para descubrir "que al final no hay nada, solo la humedad de las lágrimas que has derramado".
