El Tribunal Supremo inadmite la querella presentada por magistrados jubilados, fiscales anticorrupción retirados y varios intelectuales ante la decisión de la Fiscalía Anticorrupción de cerrar el caso. Los jueces del Supremo entienden que la querella no aporta nada nuevo y coincide con el criterio que había expuesto la Fiscalía. Los hechos denunciados no suponen un delito, están prescritos o ya fueron solventados a través de una regularización fiscal.
Así, los magistrados del alto tribunal sostienen que los hechos investigados ya fueron objeto de archivo razonado por parte de la Fiscalía Anticorrupción, y que la querella presentada no aporta nuevos datos, pruebas ni documentos que justifiquen reabrir la investigación.
"SELECCIÓN FRAGMENTADA"
En su auto, considera que "la selección fragmentada e interesada" del decreto de archivo de la Fiscalía "no puede ser ahora la causa determinante de la apertura de un proceso penal" contra Juan Carlos I.E incide en que "en términos jurídicos, nada ha cambiado tres años después para alzar la razonada y congruente decisión de la Fiscalía y acordar la apertura de un proceso penal".